Cinco nuevas familias se adhieren a la querella argentina contra el franquismo

Pontevedra
22 de abril 2021

Verdad, justicia y reparación. Es lo que buscan las familias gallegas que, a falta de un proceso judicial en España, miraron hacia Argentina para investigar el franquismo. Los descendientes de cinco nuevos represaliados han decidido adherirse a la conocida como 'querella argentina'

Familias de cinco represaliados delante del consulado de Argentina en Vigo
Familias de cinco represaliados delante del consulado de Argentina en Vigo / Deputación de Pontevedra

Verdad, justicia y reparación. Es lo que buscan las familias gallegas que, a falta de un proceso judicial en España, miraron hacia Argentina para investigar el franquismo. Los descendientes de cinco nuevos represaliados han decidido adherirse a la conocida como 'querella argentina'.

El consulado argentino en Vigo ha recibido este jueves toda la documentación que acredita los asesinatos del exalcalde de Valga, Celestino Carbia -fusilado en Monte Porreiro-; del maestro Bernardo Mato, vecino de A Estrada; y de los sindicalistas José Lijó y José Sieira, ambos de Ribeira.

A estos casos se sumó la familia del sindicalista Carlos Abella, vecino de Ponteceso, que fue condenado a cadena perpetua por "rebelión militar".

Las cinco familias presentaron formalmente los papeles necesarios para adherirse a la causa en la que la jueza María Servini está juzgando los delitos de lesa humanidad cometidos tras el golpe de estado de 18 de julio de 1936 hasta bien entrada la Transición.

Manuel Carbia, nieto de Celestino Carbia, ha destacado que temos que limpar todo o que pasou, non temos que culpar a ninguén pero témolo que limpar" y aseguró que "non hai dereito" que después de todo este tiempo de lucha "teñamos que ir a Arxentina a pedir xustiza".

Por su parte, Iria Morgade, bisnieta de Bernardo Mato, ha explicado que se adhiere a la querella porque su familiar "foi unha sombra, un completo descoñecido". Su mujer "decidiu ocultar todo isto aos seus fillos durante toda a súa vida".

Hasta el año 2000 "non soubemos a verdae" y, aun ahora, "sabémola a pequenos trazos". La familia necesita que se haga justicia, "algo que non fixo o Estado Español durante décadas, abandonando ás vítimas do seu xenocidio" y que hace que "sexan tamén responsables". 

De manera muy sentida, Dolores Sanlés, nieta de José Sieira, ha explicado que su familia "tivo medo sempre" e incluso su madre, hoy en día, "non quería que viñera porque ten medo, porque son filla dun rojo", pero ese deseo de reparación fue mucho más fuerte.

Nela Abella representó a Carlos Abella, represaliado que pasó parte de su vida en cárceles franquistas y "afortunadamente consiguió sobrevivir". Esta es, según ha destacado, una "enorme oportunidade de desagravio para meu pai e para o resto das familias" que, ha llamentado, "debería corresponder ao Goberno español, que sempre nos deixou de lado".

Andrés Lijó, sobrino de José Lijó, ha subrayado por último que "temos a oportunidade de facer ver isto ao mundo, de que a xustiza tome cartas no asunto", porque considera que "é unha vergoña que a estas alturas do século XXI teñamos que ser as familias as que fagamos isto".

Las cinco querellas presentadas este jueves son la continuación de las entregadas hace ahora tres meses por los asesinatos de Ramiro Paz, Alexandre Bóveda y Amancio Caamaño.

Todos ellos contaron con el apoyo de un grupo de trabajo específico para memoria histórica que se centra en confeccionar querellas contra los crímenes del franquismo de lesa humanidad, de cara a su adhesión a la querella argentina.

La abogada Jana Calero, de la Avogacía Nova Viguesa, ha asegurado que "vémonos obrigados a presentar todo alí debido á pasividade a todos os niveis, tanto lexislativo, político e xudicial do Estado español que sistematicamente arquiva todas as querelas que se interpoñen".

Ha apuntado que la pandemia fue un "mazazo" a la hora de obtener la documentación y de la coordinación con las familias, pero ha señalado que "foi unha gozada contar con todas as familias, que foron moi participativas, e están moi emocionadas. É super emocionante para nós".

Sobre la situación de la querella argentina explicó que tiene más de diez años de trayectoria y ya cuenta con cientos de adhesiones. "Non fai falta buscar usuarios porque moitísimas familias de represaliados como as que están hoxe aquí están moi interesadas en facer valer a verdade, xustiza e reparación contra os crimes que se cometeron contra os seus familiares", ha concluido.