Comer entre mamparas de vidrio

Pontevedra
06 de mayo 2020

Abrir con seguridad para trabajadores y clientes se ha convertido en una obsesión para los establecimientos de hostelería que, con el inicio de la desescalada, van retomando progresivamente su actividad. Para ayudarles, una empresa de Pontevedra ha diseñado un novedoso sistema de mamparas de vidrio que permite maximizar aforos

Mamparas de vidrio para la hostelería
Mamparas de vidrio para la hostelería / Pontevedresa Group

Abrir con seguridad para trabajadores y clientes se ha convertido en una obsesión para los establecimientos de hostelería que, con el inicio de la desescalada, van retomando progresivamente su actividad. Para ayudarles, una empresa de Pontevedra ha diseñado un novedoso sistema de mamparas de vidrio que permite maximizar aforos.

A partir de su experiencia en la fabricación de vidrio para la automoción y la construcción, Pontevedresa Group ha creado una mampara de vidrio templado "de quita y pon" que permite separar a los comensales que comparten una misma mesa y dividir el espacio entre mesas.

Este sistema "vale tanto para los comedores interiores como para las terrazas", según el director comercial de la compañía, Iago González Barbeito, y permitiría aprovechar al máximo el aforo de los locales "con total seguridad".

"Si de repente tienen que abrir con el 50% de su aforo muchos lo tendrán complicado para sobrevivir", explica González Barbeito, para quien la solución para el sector no pasa por convertir a los restaurantes en "chabolas con metacrilato por todos lados".

Hasta ahora, señala este emprendedor pontevedrés, estas mamparas se estaban fabricando en metacrilato y, ante la "escasez brutal" de este material y los problemas de suministro e importación, decidieron adaptar una de sus líneas de producción para crearlas en vidrio.

En el diseño de estas mamparas participaron tres personas del departamento de I+D+i de esta empresa de Pontevedra que, actualmente, cuenta con unos 80 trabajadores. Su principal reto fue que el producto fuese "manejable y movible" y, al mismo tiempo, fuese "rígido" y cumpliese con los estándares de seguridad que marcan las autoridades sanitarias.

Lo lograron, afirma Iago González, "utilizando la tecnología que usamos para pegar los parabrisas en los coches" y empleando para su fabricación "únicamente" materia prima nacional. A través de turnos de doce operarios, los pedidos se crean en cuestión de días.

Además de ser "muy fáciles de montar" y tener una "estética atractiva", estas mamparas, explica el responsable de la empresa, pueden limpiarse con productos químicos abrasivos para eliminar el coronavirus, a diferencia de las de PVC o metacrilato "que quedan machacadas" y hay que cambiarlas de manera periódica.

Su precio, asegura el director comercial de la compañía, es "muy competitivo", ya que la más básica cuesta 64 euros y, a partir de ella, se puede "customizar" su tamaño e integrar, entre otras cosas, estructuras con ruedas para separar las mesas en las terrazas u ordenar colas.

Hasta ahora han sido muchos los hosteleros que se han puesto en contacto con ellos para interesarse por estas mamparas porque, en el sector del vidrio, "hemos sido los primeros en sacar algo así", según González Barbeito.

Pero, entre otros sectores, esta solución ha despertado el interés de comercios minoristas y de los gimnasios, porque las estructuras de vidrio pueden ayudar a separar a sus usuarios cuando emplean alguna máquina de fitness "y ya nos han pedido modelos verticales y con espejos", relata el responsable de la compañía pontevedresa.