El Real Decreto de declaración de Estado de alarma aprobado este sábado por el Consejo de Ministros, y que será de aplicación inmediata este mismo sábado, detalla los establecimientos que podrán quedar abiertos al público durante los próximos 15 días en toda España. En Galicia, este documento deja sin validez las medidas aprobadas el viernes por la Xunta, que ya regulaban este tipo de actividades comerciales en términos muy similares.
Según anunció el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dentro de las medidas para intentar frenar el avance del coronavirus, queda suspendida toda actividad comercial minorista a excepción de los comercios de alimentos, bebidas y productos y bienes de primera necesidad, así como establecimientos farmacéuticos, médicos, ópticas y aquellos dedicado a la venta de productos ortopédicos e higiénicos.
También estará autorizada la apertura de negocios dedicados a la venta de prensa, combustibles, equipos tecnológicos y de telecomunicaciones y alimentos para animales de compañía, así como los estancos, las lavanderías, las tintorerías, las peluquerías y todo comercio por Internet, telefónico o por correspondencia.
Con este decreto se suspende cualquier otra actividad en establecimientos que puedan suponer un riesgo de contacto y se limitará la permanencia en establecimientos comerciales, que deberá ser la estrictamente necesaria para que los consumidores puedan adquirir sus productos. Queda suspendida, por lo tanto, la posibilidad de consumo los propios establecimientos.
Asimismo, se evitarán las aglomeraciones y se controlará que consumidores y empleados mantengan la distancia de seguridad en al menos un metro, a fin de evitar los posibles contagios.
Ante la controversia suscitada por la decisión de dejar abiertos establecimientos como peluquerías o tintorerías, cabe reseñar que hay varias explicaciones. La primera es la necesidad de "no hacer mucho daño" al pequeño negocio, la segunda tiene que ver con el impacto psicológico de no alterar totalmente la vida cotidiana de la ciudadanía y la tercera está relacionada con la higiene. Así, las lavanderías y tintorerías dan servicio a las personas que carecen de lavadora en casa, permiten un uso industrial y dan servicio a los hospitales y las peluquerías dan servicio a personas con dificultades de movilidad.