El nuevo general de la Brilat se marca como reto ampliar espacios de adiestramiento fuera de la base

Pontevedra
31 de octubre 2019

Ampliar esos espacios es uno de los retos "más importante" que se marca Luis Cortés Delgado, que este jueves tomó posesión del cargo en una parada militar presidida por el general de División Fernando García González-Valerio. Fue un "día bonito y gallego" marcado por la lluvia

Toma de posesión de Luis Cortés como general de la Brilat
Toma de posesión de Luis Cortés como general de la Brilat / Cristina Saiz

Los procedimientos judiciales que mantuvieron en los últimos años el Ministerio de Defensa y comunidades vecinales y de montes de Vilaboa, Marín y Pontevedra por la titularidad de los terrenos que ocupa la base General Morillo de la Brilat menguaron de forma significativa las zonas de adiestramiento militar. Siempre desde el respeto a esas decisiones judiciales, y a los vecinos ahora propietarios de las parcelas, la Brigada Galicia VII encarará ahora una nueva etapa en la que se centrará en la búsqueda de espacios para ampliar sus posibilidades de formación y entrenamiento. 

Ampliar esos espacios es uno de los retos "más importante" que se marca el nuevo general de la Brigada, Luis Cortés Delgado, que este jueves tomó posesión del cargo en una parada militar presidida por el general de División Fernando García González-Valerio, jefe de la División Castillejos, y marcada por la lluvia constante. 

El propio general González-Valerio agradeció la presencia en el acto a todas las autoridades civiles y militares definiendo la mañana de este jueves en la base General Morillo como un "día bonito y gallego". El nuevo general de la Brigada, por su parte, decidió acortar el acto para reducir el tiempo bajo la lluvia de los mil soldados que participaron en la parada militar: no pasó revista a la tropa, como estaba previsto, y leyó su discurso en un lugar cubierto mientras invitaba a los participantes a un vino español. 

Previamente, en declaraciones a la prensa, dio a conocer esa intención de buscar nuevos espacios. Argumentó que "dentro de un cuartel no se adiestra la infantería, la artillería, la caballería…" y que está "preocupado" porque "no podemos encerrarnos en un cuartel", de modo que es necesario buscar nuevos espacios de preparación en los que poder practicar más allá del pequeño campo de maniobras de la base. 

El general Cortés ya destaca que esa búsqueda de espacios se realizará con la "connivencia" de los vecinos, autoridades y "por supuesto" de los dueños de los terrenos  y también que sus cuatro máximas de trabajo son seguridad, medio ambiente, preparación y planificación. Además, buscarán que no sea necesario desplazarse en vehículos ni hacer gastos adicionales. 

El reto más inmediato que se marca es el llamado ejercicio Toro, las maniobras más importantes del año del Ejército de Tierra, que supondrán un despliegue por toda España de cerca de 6.000 efectivos, 750 vehículos y 12 helicópteros del 8 al 24 de noviembre. Se desarrollará en el Campo de Maniobras de San Gregorio (Zaragoza), Campo de Maniobras de Chinchilla (Albacete), Base Jaime I (Bétera, Valencia), Base General Menacho (Badajoz), Base General Morillo (Pontevedra), Base Cabo Noval (Asturias) y zona de los Monegros (Zaragoza-Huesca) y supondrá una simulación de "combate generalizado", de modo que será exigente para todas las unidades participantes, entre ellas, la Brilat. 

Además, a partir de enero, a la brigada le tocará pasar al ciclo más importante de preparación del ejército español, en el que Defensa se vuelca en que dos brigadas, una de ellas la Brilat en este caso, tengan "un año preparación completo". Recibirán más recursos de  adiestramiento que otras unidades. 

NUEVO DESTINO

El nuevo general de la Brilat aseguró este jueves sentirse "en casa". La acogida en Pontevedra ha sido "magnífica", por parte de la población civil y militar, y se encontró con una amabilidad que "llama la atención". Ya conocía la ciudad de años atrás porque tiene un hermano en la Escuela Naval Militar de Marín y, ahora que se ha reencontrado con ella, se ha dado cuenta de que se trata de una ciudad "modélica" y "exportable", si bien todavía "tiene mucho que desarrollar en los alrededores de lo que es la almendra central". "Pontevedra va tirando del carro", añadió. 

En cuanto a la Brigada, también se siente "como en casa" y destaca que hay cualidades de sus soldados que le "asombran". Se trata de la austeridad, la humildad y la dureza, y también de su capacidad para adaptarse a las condiciones meteorológicas para realizar todo tipo de actividades.