La corporación condena la violencia de ENCE y declara a su presidente "non grato" en Pontevedra

Pontevedra
22 de marzo 2021

La corporación municipal de Pontevedra ha declarado este lunes a Ignacio de Colmenares, presidente de Ence, como "persona non grata" en la ciudad. Lo ha hecho con los votos de BNG y PSOE. Toda la oposición -PP y el edil no adscrito Goyo Revenga, se ha opuesto a esta medida

Pleno municipal en el Teatro Principal de Pontevedra
Pleno municipal en el Teatro Principal de Pontevedra / Mónica Patxot

La corporación municipal de Pontevedra ha declarado este lunes a Ignacio de Colmenares, presidente de Ence, como "persona non grata" en la ciudad. Lo ha hecho con los votos de BNG y PSOE. Toda la oposición -PP y el edil no adscrito Goyo Revenga, se ha opuesto a esta medida.

En defensa de esta iniciativa tomó la palabra el nacionalista César Mosquera, que ha responsabilizado a Colmenares de "dirixir e permitir" el escrache violento sufrido por el alcalde y miembros de su gobierno. "Chove sobre mollado", ha señalado el edil, que ha apuntado que "se pisaron todas as liñas vermellas e todos os límites que se poden cruzar".

"Está clarísimo quen manda", según Mosquera, en unos hechos que ha vinculado con una "Enceborroka". Ante ellos, ha asegurado, el PP se equivoca "profundamente" al vincular su futuro político a una empresa "de este calibre" y con un comportamiento "discutible".

A este respecto, Mosquera desveló que el presidente de Ence remitió una carta al alcalde en la que, sin mencionar este "asalto" -como lo ha definido el edil-, lamenta que se le vaya a nombrar como persona non grata por un video "sacado de contexto".

El socialista Tino Fernández, por su parte, ha lamentado que Ence haya decidido "recrudecer" su estrategia para "influir" en la opinión pública y, para ello, cuente con el apoyo de partidos políticos y sindicatos "que asumen as teses da empresa como dogmas de fe".

Entiende que a la empresa "non lle interesan os traballadores nin a cidade" sino tan solo sus beneficios y ha acusado a Comisiones Obreras de actuar como "mamporreros" y al PP de "connivencia" con una violencia que ha sido instigada desde la compañía.

"Fóiselle das mans. É o que pasa cando creas un monstro, que corres o risco de perder o control", ha señalado el líder del PSOE, que considera que Ignacio de Colmenares "reflexou a verdadeira cara da empresa e sen filtros" con su polémico vídeo.

Harto de que lo vinculasen con actos violentos y escraches que, según ha dicho, son "de todo punto inaceptables", el portavoz del PP, Rafa Domínguez ha lamentado que se le acusase "sin pruebas" de fomentar estos incidentes y aseguró que dimitirá "si presentan alguna".

Domínguez ha asegurado que "me da pena" que Pontevedra sea conocida por "insultar" en sus plenos, recordando que ya Mariano Rajoy fue nombrado como persona non grata "mientras hay asesinos, violadores y maltratadores que no lo son".

Esta declaración sobre Colmenares, ha añadido, le resulta "poco apropiada" teniendo en cuenta que ante una posible mesa de negociación "él va a tener que estar sentado en ella".

El líder popular ha asegurado que el PP "defiende los puestos de trabajo" que crea la actividad de Ence y ha llegado a señalar en su intervención que si llega otra empresa que garantice ese empleo en las mismas condiciones "que le den por saco a Ence". 

"Pontevedra se parece cada vez más a un arrase al que no vienen empresas", ha aseverado Domínguez, que ha acusado al gobierno municipal de "jugar con el futuro de muchas familias" y de ser "insensibles" al sufrimiento que atraviesan por su actual situación.

A la ciudad, según el edil del PP, "ya no quieren venir empresas porque las echan".

A este respecto, Carme da Silva, que ha denunciado el "seguidismo" y el "servilismo" del PP a los intereses de la pastera, ha reiterado que Ence "non pode estar nesa ubicación" y ha subrayado que "o mellor" para el futuro de la ría de Pontevedra, para mantener los puestos de trabajo y para lograr un sector forestal "viable" es que se traslade a otra localización.

Tino Fernández ha lamentado que el "mantra" de los que defienden a Ence sea siempre que "non é o momento" para buscar una alternativa a la situación de la fábrica de Lourizán. "Nós queremos ser axentes de diálogo", ha asegurado, mediante una mesa de trabajo que permita mantener el empleo "e recuperar algo que é noso".

La actividad industrial, ha advertido Fernández, "se ten que ir de Lourizán", pero entiende que "pode permanecer na comarca" si se aborda mediante un proceso de diálogo "sinceiro" entre administraciones, empresa y trabajadores, sin que haya "ameazas, coaccións nin insultos".