Una actuación "ambiciosa" que, en materia de reforma urbana, supone la inversión más potente realizada por el Concello en los últimos años. Así ha calificado la portavoz del gobierno municipal, Anabel Gulías, la obra que transformará Loureiro Crespo y el barrio de O Castañal. El proyecto roza los 2,8 millones de euros.
El Concello ha aprobado el expediente de contratación de esta reforma, que tendrá un plazo de ejecución de once meses. Junto con la actuación principal en Loureiro Crespo, se renovarán las calles Ernesto Caballero, Forcarei, Amor Ruibal, Maestro Soutullo, Ramón Cabanillas y la Praza das Regas. Todas, según Gulías, tendrán los mismos estándares de calidad del centro de la ciudad.
El proyecto, según destaca el ejecutivo municipal, fue "participado" por vecinos y comerciantes, que realizaron aportaciones que fueron incorporadas al diseño final de este ámbito urbano. Esta actuación, que estará dividida estéticamente en tres zonas, será realizada entre la Avenida de Lugo y la plaza pública creada delante del Provincial.
Quedará un único carril de circulación, que será de entrada en la ciudad, y se aumentarán las plazas de estacionamiento reservadas para servicios.
Así, desde la rotonda entre Loureiro Crespo y la Avenida de Lugo hasta Casimiro Gómez se ampliarán las aceras, que serán de baldosa y granito, y el espacio para el tránsito de los coches será más estrecho.
El estacionamiento, también en hormigón, se colocará a la derecha y los alcorques serán de granito para plantar prunos, dando continuidad a la avenida de Lugo, ya reformada. Se renovará además la iluminación, el mobiliario y todos los servicios.
A la altura de larotonda de Doce de noviembre se instalará una columna de iluminación y se plantarán dos liquidámbar de grande porte para iniciar la transición cara un nuevo espacio, que será el segundo ámbito del proyecto e irá de Casimiro Gómez a Antón Fraguas.
En esta zona se hará un carril de asfalto diferenciado que se dirige hacia Antón Fraguas. La acera de la izquierda será de baldosa y borde de granito y la acera de la derecha de loseta vulcano, la misma que la de la plaza del Hospital. Se instalará a la izquierda el estacionamiento de taxis y a la derecha el de servicios.
También se incluye la renovación de toda la iluminación, del mobiliario y de los servicios, y la vegetación continúa con los prunos que se plantarán en toda la calle. En los extremos de este ámbito, se crearán dos grandes matos de arbolado en piezas de hormigón (con tres y dos bétulas, respectivamente) para marcar la transición a la tercera parte del proyecto.
Por último, entre Antón Fraguas y el Hospital Provincial se alargará la plaza con la instalación de dos bandas laterales de loseta vulcano y una parte central de hormigón negro en plataforma única. Se plantará el mismo arbolado que en el resto de la plaza y habrá más mobiliario urbano.
En lo que respecta al barrio de O Castañal, el proyecto incluye como mejora la pavimentación de estas calles, ya que la renovación de los servicios soterrados se asume en el proyecto principal.
Las reformas previstas en estas calles serán de dos tipos. Ernesto Caballero y Ramón Cabanillas mantendrán un carril de circulación y aceras. Llevarán plantación de árboles y mobiliario urbano. Los alcorques serán de hierro cortén, similar al de Virgen del Camino. El carril de circulación irá en hormigón negro con franjas de piedra, similar a la plaza del Hospital.
El resto de calles, Forcarei, Amor Ruibal y Maestro Soutullo, por sus dimensiones, serán de plataforma única con un tratamiento similar al ya iniciado en la avenida de Lugo. La Praza das Regas, por su parte, actuará como distribuidor de tráficos de la zona, por lo que será necesario hacer ciertos retoques en las esquinas.