"Mayor presencia policial" como respuesta a la "preocupante" situación de A Ferrería y Campolongo

Pontevedra
22 de marzo 2024
Actualizada: 30 de septiembre

Fue este viernes el eje central de la Xunta Local de Seguridad de Pontevedra. Entre 2023 y lo que va de 2024, en el entorno de la Ferrería y en Augusto García Sánchez se registraron 75 actuaciones y 20 denuncias. Todas por delitos leves

Presencia de la Policía Nacional en A Ferrería
Presencia de la Policía Nacional en A Ferrería / Mónica Patxot

La situación que se está viviendo en las últimas semanas en diversas zonas de la ciudad como A Ferrería, las galerías Oliva o Augusto García Sánchez (Campolongo), donde vecinos y comerciantes denuncian problemas de seguridad en los últimos tiempos, fue este viernes el eje central de la Junta Local de Seguridad de Pontevedra. 

En esta reunión técnica, el Concello, la Subdelegación del Gobierno y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad abordaron la situación y pusieron sobre la mesa propuesta para solucionarla. "Mayor presencia policial" en las zonas afectadas y "maior coordinación" entre las policías Local y Nacional

La reunión estuvo presidida por el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, que reconoció que están "preocupados" por la situación y "comprenden" el malestar e intranquilidad de vecinos y comerciantes ante la percepción de que existe un incremento de la inseguridad en estas tres zonas.  

También estuvo presente el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, que aportó estadísticas sobre la seguridad en la ciudad y confirmó que no existe "ninguna alteración significativa". De hecho, comparando los datos con los de 2019, indicó que en el municipio se registraron el año pasado 2.948 delitos frente a los 3.022 de ese año pre pandemia, esto es, un descenso del 1,5%. Los delitos se mantienen "estables".

Concretando sobre las zonas que generan preocupación ciudadana, indicó que entre 2023 y lo que va de 2024, en el entorno de A Ferrería y en Augusto García Sánchez se registraron 75 actuaciones que dieron lugar a la apertura de expedientes policiales, si bien tan solo hay denuncias por 20 de esos incidentes. 

Aunque reconoce que "la percepción social puede ser distinta", el subdelegado insiste en que se trata de delitos leves. Fundamentalmente, robos con fuerza en máquinas de vending, robos de móviles entre las personas habituales de estas dos zonas, lesiones entre indigentes o acciones como tirar piedras a portales. El incidente "más grave" en los últimos 15 meses fue una pelea con palos y barras de hierro en el entorno de A Ferrería. 

Lores reconoció que "efectivamente estamos preocupados" por el aumento de la actuación de un grupo de personas que suelen concentrarse en A Ferrería y Augusto García Sánchez, pero también insistió en que es una "problemática muy compleja" porque implica a personas en riesgo de exclusión social y con problemas de adicciones o patologías psiquiátricas

De esta forma, debe abordarse con mucho cuidado. Además, insistió en que desde el Concello han tenido conocimiento de que "en los últimos tiempos llegaron algunas personas fuera del grupo habitual" que solía estar en estos espacios. A las personas que llevan años en la zona las tienen "perfectamente identificadas" y los servicios sociales están al tanto de su situación, pero ahora hay nuevos ciudadanos que no tenían controlados.

Según avanzó el alcalde, su intención es trabajar para "revertir comportamientos que se salen de la norma", la mayoría de ellos delitos leves y realizados por personas insolventes, de ahí que sea también más complicado abordarlos. Más que hablar de delincuencia, Lores cree que se habla de exclusión social.

En todo caso, trabajarán con esa coordinación y mayor presencia policial para "reducir el malestar".

Justo antes de la reunión, Lores y Losada mantuvieron una reunión con vecinos y hosteleros de la zona de A Ferrería que lo pidieron expresamente para "recoger sus preocupaciones y la problemática que se está a plantear en los últimos días alrededor de algunas personas en exclusión social. Luego se celebró la Junta de Seguridad en sí, a la que acudieron funcionarios municipales y representantes de las policías Local y Nacional, la Guardia Civil y la Dirección General de Tráfico.