Ni un mes ha pasado desde que se aprobaron, a través de un decreto del alcalde, el presupuesto municipal de Pontevedra para 2024 que, inicialmente, era de 94,7 millones de euros. Pero esa cifra ya se ha quedado pequeña tras la liquidación de las cuentas del ejercicio anterior.
"A día de hoxe", según ha explicado el edil de Facenda, Raimundo González, el presupuesto se sitúa ya en los 116,5 millones. Esto es debido a la incorporación de los remanentes de 2023, compromisos de pago que ascienden a 21.779.000 euros.
González, que ha sostenido que "xa estamos con outro orzamento diferente ao aprobado", ha avanzado que la mayoría de esos remanentes, casi 17,7 millones, serán para inversiones. Otros 2,7 millones serán para gastos corrientes y 1,3 millones serán para inversiones.
La liquidación del presupuesto de 2023 arroja datos "moi similares" a los del año pasado, ha subrayado el edil nacionalista, a pesar de que se partía de unas cuentas prorrogadas.
Así, el superávit alcanzó los 11.497.000 euros, después de que la diferencia entre ingresos y gastos fuera de 10.734.000 euros, "nun contexto de conxelación de taxas e impostos por décimo ano consecutivo", ha recordado Raimundo González.
El Concello no sabe aún qué podrá hacer con ese superávit porque, al no haber presupuestos generales del Estado, en este momento está en vigor la conocida como Ley Montoro, que obliga a destinar el dinero a amortizar deuda. González confía en que el Gobierno cambie esta situación.
A este respecto, el responsable de las cuentas municipales ha destacado que la deuda de Pontevedra está en "mínimos históricos", al situarse en los 7 millones de euros, es decir, apenas el 8,33 de los ingresos anuales del Concello.
El concejal del BNG ha desvelado además que el nivel de ejecución del presupuesto de 2023 se situó en el 64,52%, mientras que el del capítulo de inversiones en el 29,91% y que el Concello cumple todas las reglas fiscales impuestas por la legislación.
La "boa saúde" financiera de la administración municipal se demuestra además, según Raimundo González, en que el Concello cuenta con casi 22 millones de euros "para poder gastar", dinero que se podría emplear en sucesivas modificaciones de crédito.