Cuando pregunto a los entrevistad@s a qué les suena Pontevedra compruebo que casi tod@s recurren a sonidos de su infancia o adolescencia: a las canciones que les cantaban, a las que marcaron su juventud o al hit de su primer año de carrera universitaria, entre otros.
Si yo tuviese que responder a la pregunta no sé qué diría, pero siguiendo el mismo patrón, recordaría sin duda una de las canciones que más escuché hasta que cumplí los 4 años: la cortina musical de los capítulos de Magic English.
De lunes a viernes, el que hoy es nuestro entrevistado y por entonces era mi profesor de inglés, usaba como material didáctico aquellos vídeos que nos permitían familiarizarnos de una forma muy amena con la lengua inglesa.
Ambos llegamos al cafetín cuando pasaban cinco minutos de la hora acordada y también ambos sabíamos que no habría hora de finalización. Dos veces intentamos cada uno decir esas palabras que anticipan la despedida "bueno pues…", "y con esto último ya…" entre otras, con escaso éxito porque siempre surgía un tema nuevo y tanto a Tino como a mí no hay nada que más nos guste que conversar.
Lamento no poder recoger en esta entrevista todo lo hablado, sería imposible y además, respecto a algunos temas, así lo acordamos. Sin embargo, les invito a que si se quedan con ganas de saber más sobre nuestro entrevistado lo paren la próxima vez que lo vean por la calle. Tino les pondrá su mejor sonrisa y podrán compartir una magnífica charla que seguro ambos disfrutarán.
-Dime una pregunta que nunca te haya gustado que te hicieran.
Creo que ninguna. Soy muy plural. Las ofensivas claro que no.
- ¿Quién es Tino Lores?
Me defino como una persona agradable, a la que le gusta conversar y que conserva la vieja tradición de pararse a hablar. Esto último es muy incómodo para quien me acompaña porque me paro con todo el mundo. Soy muy tolerante, con genio, pero tolerante. Si no me paro porque voy con prisa luego me preguntan si me pasa algo (risas)
- ¿De Pontevedra de siempre?
Sí aunque no nací aquí. Nací en Lores, pero de casualidad. Soy Tino Lores, de Lores.
- ¿Todo el mundo tiene un precio?
No, hay más gente que no lo tiene que al contrario.
- ¿Cuál es la mayor traición que te hayas hecho a ti mismo?
Te digo la segunda mayor y es no haber sido ambicioso. Mi gran fallo en política fue ese, es algo fundamental en ese ámbito.
- ¿A quién votaste en tus primeras elecciones?
A UCD. Había un grupo de maestros que quisimos apoyar a una misma opción para que triunfase y esa fue la UCD. Luego voté a otros partidos distintos.
- ¿Un año sin ir a misa o un año sin ir de fiesta?
Hombre, entre misa y la Fiesta del Albariño, por ejemplo, pues ya iré a misa otro día (risas).
- ¿Un "pecado" que practiques con gusto?
No creo en eso de los pecados, pero si en la picardía… Si peco de algo es de tomar chocolate en exceso (risas). En mi casa las peleas siempre eran con mis hijos porque se acababan el chocolate antes de que pudiera probarlo.
- ¿Qué hay más allá de la vida?
Yo espero que haya otra vida que sea mejor que esta, aunque lo de la felicidad plena del más allá me parece una ñoñería.
- ¿Qué te queda de tu faceta de profesor?
La satisfacción que siento cuando veo a antiguos alumnos triunfar. Pensar que tú has pasado por sus vidas y de alguna forma, mayor o menor, has podido contribuir a sus éxitos, muy modestamente, es una alegría inmensa. También hay que decir que los hay que no se acuerdan de ti y no saludan.
-Si sólo pudieses escuchar una misma canción en resto de tu vida, ¿cuál escogerías?
Unha noite na eira do trigo, era la que me cantaba mi abuela y siempre formó parte de mi vida.
- ¿El último capricho que te has dado?
Unas angulas con un buen vino.
- ¿Una norma social que aborrezcas?
Pues parece que la nueva norma social es no saludar. ¡Ya no se saluda! A mí me educaron de otra forma. Mi padre decía: A las mañanas "buenos días", después "buenas tardes" y por último "buenas noches". Y así hago.
-Hablas de tu padre, ¿algo que hayas heredado de su carácter?
Pues más bien he heredado de mi madre. Las rabietas que tengo son de mi madre. Tengo mucha paciencia y aguante, pero cuando estoy cansado me cabreo con facilidad.
- ¿Cómo recuerdas tu casa durante la infancia?
Soy hijo de un maestro y una ama de casa. Recuerdo especialmente los veranos largos en casa de mi abuela en la aldea. La relación que se tenía antes con los abuelos era más íntima. Mi padre siempre decía que sus hijos habían nacido prácticamente en la escuela. De 7 hermanos, 6 nos hemos dedicado a la enseñanza.
- ¿Qué te ha aportado el Camino Portugués a Santiago?
Representa los últimos 50 años de mi vida. Me ha aportado casi todo lo que soy. Hubiese tenido una vida muy distinta si no fuese por él.
- ¿Cuál es la excusa que más usas para librarte de un plan que no te apetece?
La verdad es que me apetece siempre todo, creo que debería excusarme más.
-Si pudieses pasar un día siendo un personaje histórico, ¿a quién escogerías?
Probablemente a un artista. Por decir uno español, Velázquez.
- ¿La última vez que dijiste te quiero?
A mi hija hoy mismo. Hay que decirlo mucho y yo lo hago con mi familia.
Y para finalizar, ¿a quién te gustaría ver en esta sección?
A cualquier persona del ámbito cultural.
Para Tino Pontevedra sabe a dulce, huele a frescura, es de color verde y suena a campanas. Definitivamente, Tino Lores siente Pontevedra.
EL CUESTIONARIO
− Nunca salgo de casa… sin sombrero.
− En mi nevera siempre hay… agua.
− En mi armario destacan… las bufandas.
− La edad es… el paso del tiempo.
− Siempre fui el ojo derecho de… mi mujer.
− Pontevedra tiene alma de… cultura.
− Creo en… Dios.
− El año que marcó mi vida fue… 1973.
− El mejor regalo que me pueden hacer es… prestarme su amistad
− Mi lugar en el mundo es… ayudar a quien ayuda
− Si no pudiese vivir en Pontevedra viviría en… cualquier ciudad en donde te conozca el panadero
− Mi momento favorito del día es… el vino del mediodía.
− Pontevedra… mi ciudad.