Ana Pontón, portavoz nacional del BNG, presentaba este jueves en el Hotel Galicia Palace la campaña 'Contra a crise de prezos, hai alternativa'. Durante su intervención pidió una salida justa a la crisis reclamando medidas valientes. Aboga por una propuesta fiscal centrada en la subida de impuestos a las compañías eléctricas y a las grandes fortunas con el objetivo de recaudar 180 millones de euros.
"Que pague más, quien más tiene" es la premisa de la formación nacionalista ante una situación económica que ahoga a las familias. Por este motivo, considera que debe cargarse impositivamente a las empresas del lobby eléctrico al que acusa de "forrarse" con la crisis con beneficios que considera una "estafa inaceptable".
La alternativa del BNG pasa, según expuso, por un canon eólico que deben pagar estas empresas en función de la potencia asignada a los parques y no en función del número de molinos, que permitiría que el gobierno obtuviera 25 millones extra. Además, también propone subir el impuesto por daño ambiental provocado por los embalses, obteniendo 24 millones más para las arcas públicas y, por último, un nuevo impuesto medioambiental para las redes de alta tensión, que permitiría recaudar un millón de euros.
Pontón acusó al gobierno del Partido Popular de realizar un "pelotazo fiscal" de 34 millones de euros beneficiando a las 7.700 personas con más patrimonio de Galicia. El BNG, por su parte, apuesta por una propuesta fiscal para reducir a 300.000 euros el mínimo exento en el impuesto de patrimonio descontando el valor catastral de la vivienda habitual. Esta decisión supondría, según la líder nacionalista, la incorporación de 60 millones adicionales a las arcas públicas.
En este evento participaron también el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores; la concejala de Poio, Marga Caldas; y la secretaria xeral de Galiza Nova, Marta Gómez. Durante el acto se anunció la manifestación prevista en Santiago el domingo 18 de diciembre para reclamar medidas que permitan la salida de la crisis actual.