Antonio Romero asume el mando de la Brilat, "una de las mejores grandes unidades del Ejército de Tierra"

Pontevedra
21 de abril 2017

Tomó posesión de su cargo como general jefe y comandante militar de Pontevedra y Ourense este viernes en una parada militar en la base General Morillo en la que desfilaron 1.300 militares. Trasladó su "disponibilidad para colaborar" con las autoridades civiles en "todo lo que sea necesario"

Parada militar con motivo de la toma de posesión de Antonio Romero como general jefe de la Brilat
Parada militar con motivo de la toma de posesión de Antonio Romero como general jefe de la Brilat / Mónica Patxot

El general de brigada Antonio Romero Losada es ya oficialmente el nuevo responsable de la Brigada de Infantería Ligera (Brilat). Tomó posesión de su cargo  como general jefe y comandante militar de Pontevedra y Ourense este viernes en un acto en la base General Morillo de Figueirido en el que manifestó su "satisfacción profesional" por asumir el mando de "una de las mejores grandes unidades del Ejército de Tierra".

El acto incluyó una parada militar presidida por el general jefe de la División Castillejos, Miguel Martín Bernardi, en la que desfilaron 1.300 militares y contó con el respaldo de autoridades civiles y militares de Pontevedra y el resto de la provincia, entre ellas el alcalde capitalino, Miguel Anxo Fernández Lores, poco habitual en este tipo de actos. El delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva; la subdelegada en Pontevedra, Ana Ortiz; y el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, también le acompañaron y, en su discurso, les trasladó su "disponibilidad para colaborar" con las autoridades civiles en "todo lo que sea necesario". 

Antonio Romero ha tenido palabras de elogio tanto para la propia brigada que ya está a su cargo como para su antecesor, el general Luis Cebrián Carbonell, y avanzó que su intención es tener un mandato continuista en el que intentará seguir su ejemplo y seguir adaptándose a los nuevos retos que se le presenten. 

El nuevo general lleva unos días tomando contacto con la Brigada y asegura que le profesa un gran respeto a todos sus componentes y que ha "oído de sus hazañas", de ahí su orgullo por pasar a mandarles. Además, este nuevo cometido le permite regresar a Pontevedra, una ciudad que ya conoció en el año 1998.

En declaraciones a los medios al término del desfile, Antonio Romero definió este nuevo destino como "magnífico" y "excelente" y destacó que su objetivo será que la unidad siga estando "a la vanguardia de las unidades operativas del Ejército de Tierra" y "esté siempre integrada en la población y en la región dónde está ubicada". Al respecto, insistió en que lleva el nombre Galicia VII, un dato "muy significativo" que quiere decir que "está arraigada a esta  tierra de una manera muy especial".

Bajo su mando, la Brilat asumirá a partir de 2018 al menos dos misiones internacionales, tal y como reveló el general Cebrián en su despedida. El general Romero no quiso entrar a detalar esos datos y se limitó a asegurar que esa salida al exterior sería "muy posiblemente", pero  "no hay nada ahora mismo decidido".

Antonio Romero, de 54 años y natural de La Línea de la Concepción, mandó la VII Bandera de la Legión como teniente coronel y, con su ascenso a coronel en 2013, fue destinado como jefe del Tercio Juan de Asturias. Desde entonces, había estado en el Ministerio de Defensa como jefe del área OTAN y ha dejado su destino para dar el salto a la Brilat a raíz de su reciente ascenso a general de división.