Declara en la Audiencia que los 1,3 millones de euros encontrados en su vivienda proceden de la herencia de la abuela y de las criptomonedas

Pontevedra
06 de octubre 2022

Este jueves comenzaba en la sección cuarta de la Audiencia Provincial el juicio contra dos arousanos y dos marinenses, imputados por un delito de tráfico de drogas después de que agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil confiscaran dos kilos de cocaína con un valor en el mercado ilegal de 222.784 euros. Uno de los acusados se declaró culpable mientras que los otros tres mantienen su inocencia en el inicio de la vista oral

Los cuatro acusados en la operación en que se confiscaron dos kilos de cocaína
Los cuatro acusados en la operación en que se confiscaron dos kilos de cocaína / PontevedraViva

Emocionado, uno de los acusados de Vilagarcía de Arousa, declaraba en el juicio que se iniciaba este jueves en la sección cuarta de la Audiencia de Pontevedra que su abuela le había dejado 150.000 euros como herencia y que su inversión de 75.000 euros en criptomonedas permitió que obtuviera 1,3 millones de euros, que los agentes policiales se encontraron en el registro que realizaron en su casa, repartidos en fajos de billetes en efectivo en la mesa del salón y también en un baúl del desván, con motivo de la investigación conjunta de la Policía Nacional y de la Guardia Civil denominada 'Operación Vieira - Arena Negra'. En esta operación fueron detenidas cuatro personas que se sentaron en el banquillo de la Audiencia como presuntos autores de un delito contra la salud pública.

En aquel registro en el domicilio de Ravella también se había encontrado una tarjeta plastificada con código de claves, libretas y agendas con anotaciones; una máquina de contar dinero; y una envasadora al vacío con papel de envase. Según el acusado, la tarjeta con códigos no le pertenece y explicó que la guardaba porque durante el año 2021, cuando se produjeron los hechos que se juzgan, tenía problemas de "abuso de drogas y hacía fiestas en su casa" y aparecían ese tipo de objetos que guardaba por si después alguien los reclamaba. Negó que la máquina envasadora fuera para plastificar estupefacientes para su posterior venta alegando que ese instrumento había dado negativo en el test de drogas realizado por las fuerzas policiales.

El acusado, que cuenta con antecedentes como autor de un delito contra la salud pública por el que permaneció en prisión más de un año, aseguró que cuando se produjo su detención pensó que se trataba de un "secuestro" por la actitud de los agentes y negó cualquier relación con los hechos que se le imputan, vinculados con la entrega de un alijo de cocaína para transportarla en un Audi A5, preparado con dos espacios con apertura eléctrica donde se escondía la droga, a Avilés en julio de 2021. En esa jornada, la Policía Nacional interceptaba el coche con los estupefacientes nun aparcamiento y a tres de los acusados cuando presuntamente transportaban los dos kilos de cocaína, que en el mercado ilegal alcanzaría los 222.784 euros.

De los otros tres acusados, uno de Vilagarcía y dos marinenses, solo J.S. se declaraba culpable de los hechos ante el tribunal durante la vista oral. En su caso, este vecino de Marín aseguraba desconocer al acusado poseedor de los 1,3 millones de euros y afirmaba que nunca había estado en Vilagarcía durante los días en que los agentes policiales indican que se había realizado la transacción de la droga para trasladarla a Asturias.

Reconoció que había acordado con otro de los imputados que condujera el coche porque meses antes había perdido todos los puntos y también que había quedado con la otra acusada, que en aquel momento era su pareja, en verse en Asturias para pasar unos días allí con unos amigos. Precisamente, ella en su declaración explicaba que se había trasladado por su cuenta a Avilés y nunca se imaginó que su pareja se dedicase al transporte de cocaína: "Me decía que tenía que hacer reparaciones. Fue una sorpresa. Se me derrumbó la vida", afirmó ante el tribunal. El otro acusado admitía que había trasladado a J.S. a Asturias a cambio de 20 gramos de cocaína, pero que se había quedado en un bar mientras estaba prevista la entrega de la droga.

El fiscal antidroga pide condenas de nueve años de prisión para el acusado al que se le confiscaron los 1,3 millones, al contar con antecedentes por narcotráfico. Al otro vilagarciano, que ejerció de conductor en el traslado de la cocaína, le solicita seis años y medio; mientras que la mujer se enfrenta a seis años y tres meses y J.S., único que reconoció los hechos ilícitos, a siete años. El juicio continuará el próximo martes 11 de octubre.