El corte al tráfico de uno de los carriles del puente de A Barca superó las primeras horas sin complicaciones, según informó el portavoz de la Policía Local.
Los agentes municipales desplegaron un operativo con el que se trató de resolver sobre el terreno posibles incidentes. Destapadas ya las nuevas señales de tráfico, a las 9:30 de la mañana se colocaron las vallas que impedían la salida hacia Poio, y a continuación se repetía la maniobra en la calle Alfonso XIII, en sus dos extremos, en la glorieta de Concepción Arenal y en la de Paseo de Colón.
Durante toda la mañana el tráfico discurrió fluido y los agentes informaron a los conductores de los nuevos cambios en la circulación urbana. Las principales consultas giraban sobre los itinerarios alternativos de salida y los accesos al puente de As Correntes y a la calle Alfonso XIII. Sobre este último aspecto, durante los dos meses que se espera que duren estos cambios, podrán entrar en esta calle residentes, servicios y puntualmente los padres de los alumnos de los colegios de esta zona.
Precisamente lo que más preocupaba a los responsables municipales era la respuesta de los conductores a mediodía, coincidiendo con la salida de los colegios, y aunque hubo alguna protesta "por la incomodidad del nuevo sistema" el trance se resolvió sin excesivos atascos. Lógicamente la avenida de Uruguay y el puente de As Correntes registraron un mayor tráfico de vehículos. Por contra otros viales como Echegaray vivieron una estampa inusual con pocos coches y muchos despistados que tuvieron que desviarse por Paseo de Colón.
Si hubo más incidencias en el municipio de Poio donde el desvío autorizado por la Xunta en la calle Antelo Mariño y la red viaria de A Caeira provocaron elevado volumen de vehículos por esta zona, lo más inusual fue el paso de camiones de gran tonelaje.
ATASCOS A PARTIR DE LAS 20:00 HORAS
El segundo momento crítico advertido desde la Policía Local de Pontevedra se vivió a partir de las 20:00 horas.
Durante hora y media la zona de Orillamar y la avenida de Domingo Fontán soportaron una fuerte presión de tráfico lo que obligó a los agentes municipales a dirigir el tránsito en la rotonda de salida del puente de las Corrientes.
La circulación era lenta y con cortes puntuales. La presión del trafico se extendió hasta la zona del nudo de Bomberos.
Tanto la Policía Local de Pontevedra como la de Poio subrayaron la normalidad con la que se desarrolló esta primera jornada.