Tres marineros fallecidos en el naufragio de un barco con cinco tripulantes entre Tambo y Combarro

Poio
26 de abril 2017
Actualizada: 12:26

La embarcación Nuevo Marcos, con base en Portonovo (Sanxenxo) chocó contra una batea y se hundió en un punto entre Tambo y Combarro. Un marinero logró llegar a tierra nadando, otro fue rescatado con vida y han aparecido tres cadáveres en el agua. Todos son vecinos de Campelo

Naufragio en Combarro
Naufragio en Combarro / PontevedraViva

Tres marineros han fallecido y dos han sido localizados con vida tras un naufragio ocurrido en la madrugada de este miércoles entre la isla de Tambo y Combarro, en aguas de Poio. 

La embarcación Nuevo Marcos, con base en Portonovo (Sanxenxo), pero con cinco tripulantes de Campelo (Poio), había hecho una parada el puerto de Marín y, sobre las 4.00 horas, volvía a puerto. En un momento dado, chocó contra una batea y se hundió en un punto entre Tambo y Combarro a una milla de la costa. 

Ya antes de salir el sol, sobre las 5.45 horas, fue localizado uno de los tripulantes en la playa de Combarro y en la hora siguiente una embarcación particular y el helicóptero de Salvamento Marítimo Pesca 1 localizaron dos cadáveres en el agua y a un cuarto marinero con vida, pero herido. Había conseguido agarrarse a una batea. 

Una patrullera del sevicio marítimo de la Guardia Civil, varias embarcaciones particulares, el helicóptero Pesca 1 de Salvamento Marítimo, las embarcaciones María Pita y Salvamar Sargadelos de Salvamento, los Guardacostas y varias unidades de la Guardia Civil y de Protección Civil mantuvieron durante horas un amplio operativo de búsqueda para localizar al quinto tripulante, el patrón del barco.

Finalmente, su cadáver fue localizado sobre las 12.20 horas por los submarinistas de los GEAS de la Guardia Civil en las inmediaciones del pecio.

El patrón mayor de la cofradía de Portonovo, José Antonio Gómez, ha explicado que una embarcación de Marín que participaba en las labores de búsqueda chocó con la quilla con el barco hundido y fue señalizado hasta la llegada de los submarinistas. Una vez que los submarinistas de la Guardia Civil lograron bajar a la zona, descubrieron que no estaba dentro, pero sobre las 12.20 horas finalmente fue localizado sin vida

Según indicaba, cuando chocaron, no les dio tiempo a coger el chaleco salvavidas, pero sí el aro. "Saltó del barco, cogió un aro salvavidas, o le pasaron el aro salvavidas, y a partir de ahí ya no se sabe nada más", indicaba justo antes de que apareciese el cadáver.

Los cadáveres de los dos primeros tripulantes fallecidos fueron trasladados por la Guardia Civil al puerto de Combarro y los dos heridos recibieron asistencia médica. El que fue localizado en la playa de Combarro, de 23 años, tenía síntomas de hipotermia tras haber naufragado y nadar hasta tierra firme y del otro consta que está herido.

RELATO DEL ACCIDENTE

El responsable de Emergencias del Concello de Poio, Manuel Vicente, ha explicado que el accidente se produjo sobre las 4.00 horas, pero hasta las 5.30 horas no hubo alerta por lo ocurrido. Según indicó, la mayoría de los tripulantes estaban durmiendo cuando sintieron un fuerte golpe y empezó a entrar agua. El barco dio la vuelta y saltaron todos al mar. Uno de ellos llegó una hora y media después a nado a la playa de Combarro. Se trata de Carlos Carballa Rosales. 

Aunque la distancia entre el punto del naufragio y la playa "non é moita", el joven tardó "preto de hora e media" en llegar a tierra "polo aire do norte que está pegando e o frío".

En declaraciones a los medios en el puerto de Combarro, el patrón mayor de la cofradía de Portonovo, José Antonio Gómez, ha explicado que el mar estaba en calma, pero hacía mucho viento, lo que motivó que hiciesen una parada en Marín durante la madrugada. Se dedica a la pesca del cerco y es un barco pequeño, de unos 12 o 13 metros de eslora, de modo que "non estaba a noite para eles para pescar fóra" y se resguardaron.

Cuando ya volvían a tierra "bateron cunha batea" en la zona conocida como A Brensa, la más cercana a Tambo e "intentaron ir cara á praia", pero, en su opinión, "equivocáronse aí". La tripulación "es experta", pero no pudieron evitar el fatal desenlace.

El barco Nuevo Marcos ya había tenido un naufragio en los años 2006 y 2007, con tan sólo once meses de diferencia, uno de ellos en la zona de la Lanzada y otro en el entorno de la isla de Sálvora.