Preocupación por Santi Domínguez y Fran Fandiño en la vuelta al trabajo del Pontevedra
Por Ramiro Espiño
En una semana atípica de trabajo, el Pontevedra realizó el miércoles una suave sesión de entrenamiento que tuvo como escenario el campo de la Ciudad Infantil de Príncipe Felipe. Fue más que nada un ligero contacto para no perder tono, en un ensayo al que asistió toda la plantilla, con la excepción del central David Sestelo, que está realizando el curso de entrenadores, teniendo que acudir a una clase a la misma hora que la programada para el entrenamiento.
Por el campo se acercó el entrenador, Milo Abelleira, quien disfruta de unos días de vacaciones, para observar el estado de sus jugadores, pudiendo comprobar con preocupación que la evolución de los lesionados no marcha de forma satisfactoria y que tanto Santi Domínguez como Fran Fandiño son serias dudas incluso, a pesar del tiempo que falta hasta la próxima jornada del día de Reyes, para el trascendental choque frente al Deportivo B.
El centrocampista ha mejorado ligeramente con el descanso de sus molestias de pubis que le vienen acompañando desde la pretemporada, pero aún así no ha podido entrenar con el grupo, mientras que el delantero, del que se pensaba que tan sólo padecía un molesto golpe en la tibia, se teme tenga una pequeña rotura muscular, que de confirmarse puede obligarle a permanecer en el dique seco aún por espacio de otras dos semanas.
La plantilla volverá a entrenar el jueves y viernes en Príncipe Felipe, para descansar nuevamente hasta el próximo miércoles, día 3, fecha en la que retornarán definitivamente a los entrenamientos, ya con la vista puesta en ese partido ante el filial deportivista y en un mes de enero altamente exigente, que determinará las posibilidades reales del Pontevedra para el resto de la temporada.