Se consuma la 'traición' a Pontevedra: La Federación de Balonmano vende a León el España-Suiza
Por Alejandro Espiño
León arrebata a Pontevedra, definitivamente, el partido España-Suiza de balonmano, Así lo confirma el presidente de la Federación Española de Balonmano, Francisco Blázquez, en la carta remitida este lunes al concejal de Deportes, Agustín Fernández. En ella, el máximo responsable del balonmano español reconoce que se trata de una decisión económica y niega que el acuerdo con Pontevedra estuviese cerrado.
En dicha carta, a la que ha tenido acceso PontevedraViva, Francisco Blázquez, asegura que tras tomar posesión como presidente de la Federación Española de Balonmano, estudió todos los expedientes relacionados con los partidos internacionales de la selección española, observando con respecto al España-Suiza, según señala, "que no existía compromiso oficial definitivo como posible sede de ese evento".
Reconoce que el único motivo por el que se rompe el acuerdo alcanzado con el anterior presidente federativo, Juan de Dios Román, es el económico. Entiende que "en los momentos en los que nos encontramos, es prioritario buscar recursos propios que puedan soportar los presupuestos necesarios para llevar a buen término nuestras obligaciones" y, en ese sentido, confía en que con un partido de estas características "podemos conseguir esos recursos".
Continúa Blázquez en su comunicación al concejal de Deportes diciendo que la posible sede del España-Suiza "no conllevaba canon alguno", por lo que la Federación optó por "buscar otras alternativas". Se refiere así a la cantidad que debería pagar cada ciudad por ser sede de un partido de la selección, corriendo ésta con la totalidad de los gastos originados por el mismo y la entrega de una cantidad fija pactada de antemano.
"Encontramos la predisposición de la ciudad de León para llevar a cabo dicho partido", dice Francisco Blázquez, a cambio del pago de ese canon
"Encontramos la predisposición de la ciudad de León para llevar a cabo en la misma dicho partido", dice Francisco Blázquez, a cambio del pago de ese canon. Para ello solicitaron a la Federación Europea de Balonmano (EHF), al ser un partido tutelado por dicho organismo, y al equipo contrario, Suiza, el cambio de sede, "junto con los informes técnicos preceptivos", entre otros, del director técnico y del seleccionador español.
Tras reiterar que se valoraron los pros y los contras de cambiar la sede de un partido "a otra ciudad distinta a la que en principio, y sin confirmación oficial, se había interesado entre las partes", con mención expresa del acuerdo entre el organismo federativo y el Concello de Pontevedra, en la carta el presidente de la Federación confirma, oficialmente, a Pontevedra que León será la sede de dicho encuentro el próximo 16 de junio.
Blázquez afirma además que con el partido en León "se promueven situaciones beneficiosas para el club de la ciudad, el Ademar León, en cuanto a conseguir un mejor asentamiento de futuro para el mismo, y una exhortación de compromiso por parte de las instituciones y ciudadanos de León".
Concluye esta comunicación con un deseo expreso del máximo responsable del balonmano español. "En cualquier caso, y de cara al futuro, estamos abiertos y deseosos de poder celebrar otras actividades con nuestros equipos nacionales de categorías diversas en la ciudad de Pontevedra", ciudad siempre identificada, dice, con el deporte del balonmano. "Y como consecuencia, esperamos mantener próximos contactos para que este deseo se haga realidad".
A PONTEVEDRA NO LE PIDIERON NINGUN CANON
Pero a pesar de las buenas palabras finales, la carta del presidente de la Federación Española de Balonmano no ha gustado nada en el Concello de Pontevedra. Aseguran que el cambio de sede es una "decisión unilateral y de muy bajo calado político" por parte de Francisco Blázquez. Así lo califica el presidente del Instituto Municipal de Deportes, Jaime Agulló, quien también recibió copia de esa carta dirigida a Agustín Fernández.
El presidente del IMD califica el cambio de sede de "decisión unilateral y de muy bajo calado político"
Jaime Agulló, en un correo electrónico remitido a Francisco Blázquez, recuerda que él fue una de las personas que cerró el acuerdo con el anterior presidente del organismo federativo y que la decisión de arrebatarle el partido a Pontevedra le causa una "profunda sorpresa". Pero va más allá. Asegura que la sorpresa es aún mayor, "cuando se cambian las normas de juego en medio de la partida, y no se le plantean al jugador que está sentado en la mesa, es decir el Ayuntamiento de Pontevedra, para determinar si quiere seguir jugando o no".
Se refiere así el presidente del IMD, que reitera que esta decisión causa "una mala publicidad de la que estamos saturados en nuestro deporte", a que a Pontevedra jamás se le pidió ningún tipo de canon para que la selección española de balonmano jugase en la ciudad del Lérez, a pesar de lo cual, gracias a la colaboración de varios patrocinadores, se iba a costear la estancia en Pontevedra del equipo nacional durante toda una semana.
O que el mismo argumento que defiende el presidente de la Federación para ayudar económicamente al Ademar de León, es lo mismo que se le niega con esta decisión a la Sociedad Deportiva Teucro. Parte del dinero recaudado iba a servir para ayudar a la entidad a superar sus graves problemas económicos, una cantidad con la que el club ya contaba tras el acuerdo alcanzando hace meses. Compromisos todos ellos incumplidos, por mucho que Blázquez se empeñe ahora en maquillar la realidad.
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