José Antonio Gómez Novoa
Ventana indiscreta: límites
En la mayoría de los países de nuestro entorno, se potencia el uso de las energías renovables. Aquí en España, lugar con más horas de luz solar las demonizamos, y para más INRI creamos el llamado "impuesto al sol", que los políticos han llamado peaje de respaldo, reflejado en un recibo de la luz imposible de comprender y de asumir.
62000 familias decidieron invertir en huertos solares haciéndose eco de la publicidad institucional, y los cambios legislativos que realizaron los diferentes gobiernos al ritmo que marcaban las empresas eléctricas han provocado su ruina. Existen límites para los ciudadanos pero no para los lobbies más poderosos.
En el mundo de la cocina, queremos estar situados en el mapa gastronómico mundial con el máximo de estrellas, y hemos llegado muy tarde a cuestionar la evidente explotación de la mayoría de los aprendices/becarios. El privilegio de aprender con los grandes chefs no debe estar vinculado a la esclavitud laboral. Si sacamos rendimiento a una persona (trabajo) debe existir una contraprestación regulada al igual que la hay cuando el médico residente presencia la operación que realiza el cirujano "estrella".
Un trabajador de una empresa de transporte de mercancías me indica que a él le exigen un máximo de 5h 30m de tiempo de entrega entre Vigo y Madrid, y que su vehículo sólo puede circular a un máximo de 90 ms por hora, teniendo en cuenta que hay 589,9 kms., no me salen las cuentas. En la empresa repercute beneficios, y en el empleado sanciones administrativas/penales, pérdida del carnet de conducir e imposibilidad de trabajar
Los grandes bancos, cuando se deshacen de sus presidentes o éstos abandonan la entidad en quiebra con la “satisfacción del deber cumplido”, les/se indemnizan con pensiones de más de 20 millones de euros, y pagan menos de 1000 euros a los nuevos contratados en jornadas diarias de más de 12 horas.
Podría seguir con mil casos más, pero hasta en este artículo debe haber límites. La ausencia de estos a nivel social supone un aumento indudable de la injusticia y la precariedad.