Vicente G. Rivas
Por Mariano, por Galicia, por mi hija paciencia
Cada jueves se especula y mucho sobre la cantidad de verdades que dice el Gobierno por cada kilo de palabras que pronuncia. Sesudos analistas siguen tratando de desentrañar lo que afirmado por Mariano Rajoy el pasado domingo y el núcleo duro de su equipo más próximo unos días antes tras el Consejo de Ministros. En realidad, creo yo, no hay mucho que desentrañar. El pontevedrés representó, insisto, representó el papel de gallego: "sí pero no, voy pero vengo, subo y/o bajo". Pero esta actuación es una pantomima porque los nacidos en aquellas tierras del último piso, al fondo arriba a la izquierda, sabemos de antemano cuál es nuestra dirección, es decir, si subimos o bajamos.
En este punto una advertencia por salud: 'La lectura de este post no es recomendable para los upydianos. Su autor presume de origen pero puede esconder que en realidad es gallego en el sentido más peyorativo del término'. Por cierto, el caso de la lideresa magenta y Galicia debería ser estudiado en las facultades de Márketing o en los máster de Comunicación Política bajo el título 'Cómo no rascarla en las elecciones en una comunidad en 8 palabras o una frase'. Ha logrado UPyD ser el único partido que no consigue nada en Galicia a pesar de haber hablado mal de sus gentes.
Regresando a la idea génesis de este artículo, tras las palabras "sinceras" según los medios más 'independientes'- ABC y La Razón-, los periodistas más avezados iniciaron el análisis de las mismas. Grosso modo, las tendencias giran en torno a si en realidad Rajoy se guarda un as en la manga, se pone en el peor de los escenarios para luego, si hay un pleno empleo espontáneo, atribuirse las medallas oportunas y ganar las elecciones de nuevo; o si, por el contrario, no hay conejo en la chistera y las cosas están como están y no mejoran demasiado de aquí a finales de 2015/16/17... El paro, a tenor de este hipotético panorama, seguirá subiendo y solo respirará un poco gracias a los nacionales que proseguirán su huida los próximos años ¿Dónde estaría ahora la tasa de desempleo de no haberse producido esa 'movilidad exterior'?
Lo que es evidente es que cuando a un Gobierno se le hace la ola cada vez que comparece ante los medios, tenemos un problema. Cuando ese mismo dirigente, en sus contadas apariciones rehúye las preguntas y contesta acerca de lo bien o mal que está el tiempo, tenemos un problema. Cuando tras año y medio el mejor argumento para explicar determinadas medidas la 'herencia recibida', tenemos un problema. Cuando el jefe del Ejecutivo utiliza la palabra sincero para apelar a la responsabilidad propia y ciudadana pero incumple el 85% de su programa, tenemos un problema; si su partido se encuentra inmerso en un proceso judicial por presunta financiación ilegal, sobresueldos, corrupción y nadie da una sola explicación creíble, tenemos un problema. Cuando lo único que cumplen Rajoy y su equipo es en materias como el aborto y la educación para satisfacer a los sectores más radicales
Si unimos todo, nos hallamos ante un follón de proporciones desconocidas. El presidente aseguró que él y su equipo saben lo que hay que hacer para salir de la crisis. Esto puede suponer que Mariano actúa como gallego y tiene preclara la dirección a tomar y, por encima de todo, que es la correcta. Ante esto a mí me surgen una duda y una convicción. La primera es despejar la incógnita de si el presidente, de verdad, sabe o no sabe lo que hace, aunque elegir como titular de Sanidad a quien ha tenido un Jaguar en su garaje desconociéndolo provoca cierta desconfianza. Hay más ejemplos pero cada cual que añada y extraiga lo que considere oportuno.
La convicción se refiere a Galicia. Mientras en el resto del Estado los sondeos prevén una caída destacada de los populares, en estas tierras lo nuestro es nuestro. Más allá de fotos del presidente de la Xunta acompañado de un narco (algo así como el Jaguar de la ministra), del chapapote como nuevo marisco, de la repetición de apellidos hasta la saciedad en diputaciones y ayuntamientos, de preferentes, de caciques buenos y malos... el PP seguirá ganando, en 2015 y en 2050 porque el espíritu de Don Manuel ahí sigue y seguirá. Además, en el Fogar de Breogán defendemos lo nuestro; Rajoy es hijo de la tierriña y como dijo aquella famosa filósofa "Yo, por mi hija, MATO" y claro, el presidente es de los nuestros, hijo de Galicia y por él...
Confiemos, tengamos la paciencia que reclama Mariano y de la que siempre los gallegos hemos hecho gala. Total, un pouquiño máis.
4.05.2013