Pedro De Lorenzo y Macías
¡Vicisitudes en Caldas de Reis!
En episodios anteriores, comentamos que Caldas de Reis en el año 569 perdió su sede episcopal, siguiendo la reconstrucción eclesial por San Martín Dumio. Le modificaron su primitivo nombre "Aquis Celenis". La denominaron KALIDAS; encontramos referencias en el siglo XI en el reinado de Alfonso V (1019-1025). Poco le duró este nombre; el papa Pascual II, en su bula de 1110 la denomina TERRA TERMARUM. Sobre este nombre hay diversas opiniones, la más genérica es que se refiere a las aguas termales de Caldas y de Cuntis.
En nuestro reino gallego, sobre todo en Caldas de Reis, había diversidad de creencias: el Priscilianismo, el arrianismo y el catolicismo.
Leovigildo fue rey de los visigodos (568-586). Por sus reformas y su labor de expansión y reorganización territorial, es considerado el rey visigodo más importante y uno de los soberanos más admirados de toda la historia de España. Incorpora a su mandato nuestro reino Suevo y declara al Catolicismo como religión oficial. Permitió matrimonios mixtos: godos con hispanorromanos y viceversa. La problemática religiosa en Caldas de Reis no fue capaz de solucionarla.
Su hijo Recaredo, en el III Concilio de Toledo, obliga a todo su reino abandonar el arrianismo, el priscilianismo; todos deben de aceptar el catolicismo, buscando la unificación religiosa. Se inician algunos años de olvido de esta preciosa comarca, con su villa engatusadora. En el 654 se edita el único código de Derecho, en el reinado de Recesvinto: "Liber Iudiciorum o Código de Recesvinto".
En el reinado visigodo hubo serias contiendas, durante los reinados de Égica y Witiza. Llega al poder el último rey visigodo, Don Rodrigo. Sus rivales, partidarios de Witiza se aliaron con Táriq Ibn Zivad, dando entrada a los musulmanes en La Península Ibérica. Es una opinión muy considerable. Algunos afirman que fueron los judíos los que apoyaron a los musulmanes, ya que el trato que recibían de los Visigodos era esclavizante. Hay más opiniones.
Muerto Witiza, rey visigodo, Rodrigo culmina un golpe de estado en el 710. Asumió el trono con la ayuda de un sector aristocrático, relegando de la sucesión a los descendientes de Witiza y a sus seguidores.
Sobre Rodrigo, el último rey Visigodo, afloraron mitos y leyendas. Pincelamos dos: "Rodrigo entra en una misteriosa mansión de Toledo, haciendo caso omiso de las advertencias; la puerta estaba clausurada por candados correspondientes a reyes visigodos. Su orgullo, su chulería, le anima a forzar la puerta; encuentra un cofre con un pergamino, el cual reseña a los árabes y anuncia que invadirán la Península en el día que alguien profanase esta mansión".
La segunda leyenda: "Rodrigo viola a la hija a un noble de Ceuta, que se la había encomendado para su educación; el noble, enojado, va al encuentro de Musa Ibn Nusayr, gobernador árabe del norte de África; le facilita la entrada y se inicia la conquista árabe" (Es posible que el nombre de este noble fuese Julián o Urbano).
Reseñamos la batalla de Guadalete (711). Rodrigo presenta batalla a los árabes y es derrotado. Los musulmanes intentan someter a todos los pueblos de la Península Ibérica. Comenta Santi Pérez: "No hay vestigios sobre esta guerra; sabemos que Rodrigo comandaba el centro del ejército visigodo; los hijos o hermanos de Witiza, dirigían las alas que desertaron en el momento del inicio de la batalla por los siguientes motivos: estaban enfrentados con Rodrigo porque les había arrebatado el trono que les correspondía; habían pactado con Musa Ibn Nusayr. Los bereberes, dotados de armamento más ligero que la caballería visigoda, los rodearon y Rodrigo fue derrotado".
Hay varias opiniones sí Pelayo participó en esta batalla; una controversia sí era visigodo o miembro de la extinguida de la aristocracia sueva. Unos vaticinan que nació en Córdoba; otros, en Asturias. (En aquellos tiempos Asturias era parte de Galicia).
Don Ramón Cajade (Voz de Galicia, 11-4-1976) defiende que era de origen suevo y que nació en Tui y se consolidó en el obispado de Bretoña. Asevera que era de etnia sueva y nacido en Galicia. Lo fundamenta en las crónicas musulmanas contemporáneas a la batalla de Covadonga. Detalla que el rey Witiza, visigodo, trasladó la capital a Tui; en ella, vivían el noble suevo Fabila, su mujer y su hijo Pelayo. Witiza se encaprichó con la mujer de Fabila; le dio muerte. Los familiares de Fabila huyeron con Pelayo y se establecieron en la sede de Britonia.
El obispado bretón surge con la llegada masiva al norte de Galicia de refugiados celto-britanos procedentes de las Islas británicas. Esta diócesis fue sustituida por la de Mondoñedo en la segunda mitad del siglo IX.
Las noticias del asesinato de Fabila se encuentran en el Cronicón Albedense o Emiliansense, escrito en el siglo IX.
Pelayo tuvo dominio en las tierras broteñesas; concedió grandes privilegios a Vivero. Benito Vicetto apuesta que su corte estaba ubicada en Santa María de Bretoña; se basa en los vestigios de una primitiva edificación y en la existencia en antiguas escrituras de foros de topónimo "A Casa do Pazo".
En el ensayo anterior comentamos que San Martín Dumio reorganizó las sedes suevas, tal como las observamos en el mapa. Nuestra Caldas de Reis perdió su sede episcopal, pero no su gran influencia en nuestra historia.
Benito Vicetto nos brinda algunas de sus indagaciones: "Los relatos árabes de la época se refieren a Pelaio como Belay, ya Galicia como Dialikyan.
El historiador Ahmed Mokri: "El primero que reunió a los cristianos fue Belay, del pueblo de la Dialikyah". Hhaya en Ahmed: "En tiempos de Ambesa ben Sohhim asomó en Diañikyah el guerrero Belay". Su relato sobre la vida e historia del posible Pelayo es digna de su lectura. Un trabajo muy laborado. ¡Claro! Presenta algunas interrogaciones y tal vez alguna contoversia; todo ello es bueno, siempre que aporten argumentos y se impliquen en ello.
Los hechos históricos se escriben siguiendo las directrices del poder del momento. Esto lleva a considerar que todos los documentos tienen varias lecturas. No es necesario analizar este argumento: un vistazo cómo nos cuentan la historia del siglo XX en este régimen que se represente a sí mismo, y no a la voluntad popular.
No vamos a entrar en polémicas sobre la cuna del posible Pelayo. Analizando todo lo expuesto, podemos intuir que era perteneciente a la nobleza del reinado suevo, sometido por los Visigodos. Nuestros pueblos gallegos no sintieron simpatía por este dominio y la imposición de acatar, todos, la religión católica, sobre todo en nuestra Caldas de Reis.
Dando crédito que Witiza trasladó sus cortes a Tui y el asesinato de Fabila para quedarse con su mujer, es posible que Pelayo se criase en Bretoña. Esta sede lindaba al norte con la actual Asturias, antes era Galicia. Conocía muy bien todos los recovecos y la guerra de guerrillas propia de los pueblos de etnia celta.
Es posible que estuviese en la batalla de Guadalete, defendiendo a Don Rodrigo y, en esa batalla, tomase buena nota de la manera de hacer la guerra por los musulmanes. Eran mejores que los hispanos en campo abierto.
Esto motivó que fue reculando, agregando a su ejército, miembros de etnia celta, de suevos ya establecidos en Galicia. Tal vez, en la noche, practicasen alguna escamaruza en las tropas musulmanas, obligándoles a perseguirles. Los fue atrayendo hasta los astures, de etnia celta y sueva. Logró que los invasores entrasen en Cangas de Onis.
Otman ben Neza (Munuza) fue acometido por algunas tropas galaicas, sufriendo pérdidas en su ejército. Solicitó ayuda al valí Ambasa, que envió refuerzos al mando de Al Qama. Ciñen este episodio en el año 718. Viendo la llegada masiva de refuerzos musulmanes, se retiran a Covadonga y el enfrentamiento se produce en 722. Las tropas árabes fueron diezmadas; Obligan a Munuza abandonar Gijón, donde estaba ubicado. Al Qama murió en esta batalla.
Hay varias controversias sobre estos hechos expuesto: "La batalla fue en 718", "Pelayo no existió", "El número de guerreros que formaban los dos grupos". No entramos en debate.
Claudio Sánchez –Albornoz la sitúa en tiempo de Ambasa (722); Julia Montenegro y Arcadio del Castillo opinan que se produjo en el gobierno de AL-Hurr, año 718. Se basan en la crónica de Alfonso III, año 881.
El antropólogo Carlos Medina de Rebolledo aclara que la etimología de Covadonga es de origen de la lengua gótica, que significa "Cueva Larga". No es dónde está sito el santuario de la Virgen de Covadonga, sino otra cercana, donde pudieron refugiarse los valientes que iniciaron la reconquista. Hace notar que la lengua gótica era de origen escandinavo y que era una de las lenguas que hablaban suevos y visigodos".
Esta batalla sirvió de alicate para que pueblos cántabros, vascones, iniciasen la lucha contra el invasor musulmán, dando origen a distintos reinos cristianos, leyendas y mitos.
La historia se escribe según el prisma de los que gobiernan; sobre un hecho acaecido, lo politizan buscando su rentabilidad, ya política, ya histórica.
Vamos a exponer la crónica de Al Maggari (1578-162), la versión musulmana: "Dice Isa Ibn Ahmand al-Raqi que en tiempos de Anbasa Ibn Suhaim al-Qalbi, se levantó en tierras de Galicia un asno salvaje llamado Belay [Pelayo]. Desde entonces empezaron los cristianos en al-Ándalus a defender contra los musulmanes las tierras que aún quedaban en su poder, lo que no habían esperado lograr. Los islámicos, luchando contra los politeístas y forzándoles a emigrar, se habían apoderado de su país hasta que llegara Ariyula, de la tierra de los francos, y habían conquistado Pamplona; en Galicia y no había quedado sino la roca donde se refugia el rey llamado Pelayo con trescientos hombres. Los soldados no cesaron de atacarle hasta que sus soldados murieron de hambre y no quedaron en su compañía sino treinta hombres y diez mujeres. Y no tenían que comer sino la miel que tomaban de la dejada por las abejas en las hendiduras de la roca. La situación de los musulmanes llegó a ser penosa, y al cabo los despreciaron diciendo «Treinta asnos salvajes, ¿qué daño pueden hacernos?». En el año 13316 murió Pelayo y reinó su hijo Fábila . El reino de Belay duró diecinueve años, y el de su hijo, dos.
Detallemos la crónica de Alfonso III, con fecha del 881, denominada "de Albenda: "Al Qama entró en Asturias con 187 000 hombres.17 Pelayo estaba con sus compañeros en el monte Auseva y que el ejército de Alkama llegó hasta él y alzó innumerables tiendas frente a la entrada de una cueva. El obispo Oppas subió a un montículo situado frente a la cueva y habló así a Pelayo: «Pelayo, Pelayo, ¿dónde estás?». El interpelado se asomó a una ventana y respondió: «Aquí estoy». El obispo dijo entonces: «Juzgo, hermano e hijo, que no se te oculta cómo hace poco se hallaba toda España unida bajo el gobierno de los godos y brillaba más que los otros países por su doctrina y ciencia, y que, sin embargo, reunido todo el ejército de los godos, no pudo sostener el ímpetu de los ismaelitas, ¿podrás tú defenderte en la cima de este monte? Me parece difícil. Escucha mi consejo: vuelve a tu acuerdo, gozarás de muchos bienes y disfrutarás de la amistad de los caldeos». Pelayo respondió entonces: «¿No leíste en las Sagradas Escrituras que la iglesia del Señor llegará a ser como el grano de la mostaza y de nuevo crecerá por la misericordia de Dios?». El obispo contestó: «Verdaderamente, así está escrito». [...] Tenemos por abogado cerca del Padre a Nuestro Señor Jesucristo, que puede librarnos de estos paganos [...]. Alqama mandó entonces comenzar el combate, y los soldados tomaron las armas. Se levantaron los fundíbulos, se prepararon las hondas, brillaron las espadas, se encresparon las lanzas e incesantemente se lanzaron saetas. Pero al punto se mostraron las magnificencias del Señor: las piedras que salían de los fundíbulos y llegaban a la casa de la Virgen Santa María, que estaba dentro de la cueva, se volvían contra los que las disparaban y mataban a los caldeos. Y como a Dios no le hacen falta lanzas, sino que da la palma de la victoria a quien quiere, los caldeos emprendieron la fuga...".
Posible conclusión: A los suevos, sobre todos a los distintos gremios de etnia celta, no acataron la dominación VISIGODA; entre ellos, estaría los Cilenos, establecidos en Caldas de Reis y llegaron a ocupar las tierras entre los ríos Ulla y Lérez. Ante la invasión árabe, ellos se refugiaban en altas montañas que fuesen buena defensa y fácil retirada. Tal vez Pelayo los invitase a este pueblo y otros a retirarse y luchar en un lugar desfavorable para los musulmanes.
No es de extrañar que Witiza trasladase las cortes a Tui, ya que las escamaruzas de los pueblos sometidos eran muy frecuentes. Es posible que Pelayo estuviese presente en la batalla de Guadalete, ya que conocía muy bien el potencial bélico de los invasores.
Tenemos poca documentación cómo soportó Caldas de Reis los pocos años que los árabes dominaron sus tierras. Es una villa que guarda las tradiciones antergas. Observen con qué mimo cuidan su robleda, árbol muy venerado por la etnia Celta. ¡Una verdadera belleza!
Pedro de Lorenzo y Macías.
Fotografías: © Celina Reguera. Coordinadora Área de Cultura de Caldas de Reis.
FUENTES: Luis A. García Moreno: 1982 "Las invasiones y la época visigoda"; Juan José Sayas Abengochea y Luis A. García Moreno: "Romanismo y germanismo"; Eduardo Manzano Moreno, Julio Valdeón.