José Antonio Gómez Novoa
Ventana indiscreta: Aquel día en la playa
Al fin el verano ha llegado, un día de playa, marea baja y las Cíes al fondo cerrando la ría. Nos instalamos. Al lado unos adolescentes, cogen una pelota y se ponen a golpearla, sin tener en cuenta a las personas cercanas. Le comentamos que por favor aprovechen la bajamar, para jugar con más espacio, y alejados de las toallas. Asienten, piden perdón y se desplazan a un lugar más seguro para jugar tranquilamente. Mientras, sus padres, hacen comentarios despectivos sobre nosotros. ¿Quiénes son los culpables, los padres o los hijos?. ¿Cuánto beneficio o perjuicio puede hacer el aprendizaje observacional (padres como referentes)?.
De la playa al chiringuito, dónde habíamos reservado mesa. Nos sentamos, y observo a una familia de 8 miembros, el nieto en brazos del abuelo, la abuela al lado disfrutando de un día juntos. El niño es su bien más preciado, se desviven por él. Se acerca una avispa velutina, para probar el pulpo, merodeando la cabeza del niño. La abuela, hace un gesto suave para alejar a la “especie invasora”, y la nuera comienza a gritar y a recriminar a su suegra: ¿Pero qué haces?. ¿No te he dicho que….?.
La abuela baja la cabeza, el abuelo acaricia al niño, y no alcanza a comprender. El resto de la comida, mientras la familia sigue la charla como si no hubiera pasado nada, la abuela intenta buscar la mirada de la nuera, pero esta, la rehúye con gestos de menosprecio. ¿Por qué buscamos puntos de desencuentro en vez de encuentro?. ¿Por qué no cuidamos a nuestros mayores?.
Mientras tanto, una pareja se acerca a Tomás el camarero, y le preguntan si pueden comer. Son las 14,15, Tomás les dice que hay muchas reservas, y que sólo tendrán mesa a partir de las 16,00 horas porque la cocina no da más abasto. Ellos ven una mesa de dos, alejada del comedor, que sólo está para aperitivos, y comienzan una retaila de improperios: ¿Pero qué pasa?. ¿Usted, no quiere darnos de comer?......... De verdad, no somos capaces de respetar el trabajo de los demás. Prima el yo,mi,me,conmigo sobre el nosotros y el otro.
Por lo demás, buena compañía, la comida exquisita, un árbol que nos da la sombra necesaria, y la brisa del mar que nos inyecta el combustible necesario, para afrontar el resto de la semana. Feliz verano amigos y amigas. @novoa48