Hoy es un día triste para el club deportivo de Mosteiro-Meis, porque ayer falleció uno de sus insignes representantes, pasando de presidente a delegado y en sus últimos años como utillero, lo que dice mucho de su sencillez, humildad y servicio por este club, al que amaba y estaba totalmente entregado. José Betanzos Doval, "Pepe" para sus conocidos y amigos, era una persona encantadora, siempre sonriente y dispuesto a ayudar en lo que fuera necesario.

Yo tuve la satisfacción de conocerlo con motivo de llevar a mis nietos a los partidos y entrenamientos, comprobando en dichos encuentros el gran cariño que tenía por los niños y como disfrutaba viéndolos jugar, quizás vislumbrando en ellos una prometedora cantera del equipo de sus amores. Por todo ello querido Pepe, en este día tan triste de tu despedida, como al jugador que antes de terminar el partido, abandona el campo de manera inesperada, te damos todos un gran aplauso de agradecimiento, con la seguridad de que, desde el cielo, seguirás apoyando al club de tus amores, y al que estabas permanentemente entregado.

 

Adolfo Costas Gascón