Noel Queipo
La desolación de 'El Hobbit'
Empezamos la vuelta al cole y la cuesta de Enero y para ello tengo una buena noticia y una mala. La primera venga va, la buena: a partir del día 15 y hasta Abril podremos asistir todos los miércoles a nuestro cine por 3,90 . ¡Bien! pero Siempre hay un pero, y es aquí cuando viene la noticia mala: ¿Pero qué pasa en la cartelera pontevedresa? Soy la primera en alegrarme de que volvamos a tener cine pero no dejo de echar en falta numerosos títulos en nuestra taquilla
Y no hablo de imposibles: no hablo de cine independiente, ni de cine en versión original, ni de cine europeo, ni de cine español de menos recursos no, no me voy a meter en eso, aunque por supuesto que también lo echo en falta, pero eso ya en la mayoría de cines así que supongo que es un tema aparte. Me refiero a títulos más comunes que están en las salas y que a Pontevedra no llegan como 12 años de esclavitud, El consejero o A propósito de Llewyn Davis. Personalmente, creo que falta calidad en la taquilla, pero bueno, habrá que darle un voto de confianza y esperar a ver lo que pasa de aquí en adelante, después de la programación especial de navidad (¡la navidad nos trae por la calle de la amargura!).
Como ya habréis deducido del título, la película con la que me reencontré con el cine pontevedrés fue El Hobbit: la desolación de Smaug. A pesar de haberme jurado y perjurado al ver la primera parte que no volvería a gastar semejante pasta para ver más "cachos" de El Hobbit, finalmente el amor incondicional por la trilogía de El Señor de los Anillos volvió a engañarme y fui a verla y ¿qué puedo decir? Pues que es bastante mejor que la primera pero sigue siendo un tercio de peli, con lo cual la sensación (al menos la mía) es un poco de engaño. No es una película porque es un trozo de película, y por muy bien que esté, lógicamente te deja a medias y cuando parece que lo bueno y lo más interesante va a comenzar ¡zás! Negro y créditos.
Ya desde el principio la idea de dividir el libro en tres películas no me convenció ni lo más mínimo, entiendo que a veces es difícil adaptar libros enteros a 2-3 horas de película, sin embargo se puede hacer. En El señor de los Anillos, por ejemplo, creo que está hecho de una forma magistral, vale que es una misma historia dividida en tres pasajes y hay una película de cada pasaje, pero creo que está muy lograda y aunque te deja en ascuas de una peli a otra, sí se nota que "ha pasado algo". Lo que han hecho con El Hobbit ha sido estirarlo con pinzas para aprovechar el tirón. No los culpo porque la saga generará seguramente unas cantidades ingentes de dinero, pero (insisto desde mi punto de vista) creo que se han pasado tres pueblos (o dos películas).
Un ejercicio que he realizado esta semana y que os recomiendo mucho, es releer el libro y compararlo con las películas. Teniendo las dos cosas frescas la verdad es que da para escribir mucho sobre el tema. Hablábamos en otra ocasión de que al hacer adaptaciones siempre hay muchos aspectos que cambian (lógicamente se pasa de un medio "de palabras" a un medio "de imágenes") y, muchas veces, además de esos cambios se introducen tramas nuevas para completar o darle más fuerza a la historia. En El Hobbit (hablo de los 2/3 de película que ya se han estrenado) también ocurre, se introducen varias tramas nuevas pero más que por enriquecer la historia se ve claramente que es con el fin de alargarla. No voy a negar que las tramas inventadas tengan su aquel, de hecho empastan muy bien, pero inventar tanto con el único fin de alargar el metraje no me parece del todo lícito.
En cuanto a imagen es una pasada, como siempre. Paisajes, atrezo, efectos especiales, movimientos de cámara todo luce de forma impactante en el total de la película y eso no lo voy a negar. Bueno, poniéndome quisquillosa diría que lo único que me sorprendió negativamente en este aspecto fueron unos planos que hay en la secuencia de los enanos en los barriles bajando por el río. Unos planos que parece que están hechos con el tipo de cámara deportiva que se lleva mucho ahora, tipo "GoPro" (no quería hacer "publi" pero es la mejor forma de entendernos), y que no pegan ni con cola con el resto de las imágenes ni por estilo ni por calidad y cantan muy mucho, el "Aserejé" por lo menos.
Por último, dos aspectos muy positivos que tiene la película son los protagonistas y la banda sonora. Los personajes son geniales y la interpretación es muy buena, destacaría el trabajo de Martin Freeman (el "querido Watson" de la serie Sherlock) en el papel del temeroso y quejica Bilbo Bolsón y, sobre todo, el maestro de maestros sir Ian McKellen en el papel más carismático y llamativo, Gandalf. La música, al igual que en los films anteriores, es preciosa. Me llamó mucho la atención la canción de Ed Sheeran, no sabía que había participado en la película pero su voz inconfundible y llena de personalidad le aporta mucha fuerza a la banda sonora. Os dejo la canción porque merece la pena escucharla.
"Cierto que casi siempre se encuentra algo, si se mira, pero no siempre es lo que uno busca" (J.R.R. Tolkien, El Hobbit).