Cierre simbólico del campo de tiro de Cernadiñas Novas: "la Xunta está de okupa, sin pagar el alquiler durante 5 años"
Por Natalia Puga
Cinco años después de que el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Pontevedra determinase que los terrenos sobre los que se asienta el campo de tiro de Cernadiñas Novas son de la comunidad de montes de Santo André de Xeve, los comuneros harán valer su título de propiedad y van a proceder al cierre simbólico de las instalaciones. El próximo domingo, 4 de febrero, bloquearán el acceso y todo aquel que quiera acceder tendrá que pedirles permiso.
El gesto simbólico lo harán el domingo a las 13.00 horas e invitan a toda la población que quiera sumarse en sus protestas. De esta forma, pretenden hacer ver que los terrenos son suyos y están 'okupados' y, al mismo tiempo, ejercer presión para que la Xunta de Galicia les pague por el uso de la propiedad.
Para entender este conflicto es necesario remontarse a años atrás. El Concello de Pontevedra cedió por escritura pública estos terrenos al Estado para la construcción de un centro deportivo en el año 1973. Finalmente, solo se construyó un campo de tiro y, tras diversas cesiones, el Estado lo cedió a la Xunta de Galicia.
Los comuneros de Santo André de Xeve consideraban que esa escritura pública no era válida porque los terrenos eran suyos y acudieron a la vía judicial. Finalmente, a finales de 2018, el juzgado le dio la titularidad de la parcela, de más de 100.000 hectáreas. Una vez que fue firme, en 2019 empezaron a negociar con la Xunta de Galicia porque construyó el campo de tiro y es titular del mismo, para reclamarle la expropiación o el pago de un canon.
Suso Castro, presidente de los comuneros, explica que fueron negociaciones largas en las que, finalmente, hace dos años, acordaron que les pagarían un canon a cambio de la cesión de los terrenos. Se fijó el precio que quería la administración, de 0,3 euros por metro cuadrado, inferior a la propuesta inicial de los comuneros, de 0,5. Una vez fijado el canon, "nunca más se volvió a saber de la Xunta".
Según explica Castro, los abogados de la comunidad de montes llevan dos años realizando llamadas a la Xunta y, tras mucho insistir, recientemente volvieron a retomar las negociaciones con la Secretaría Xeral para o Deporte, a través de su máximo responsable, José Ramón Lete Lasa. En ese momento, según la versión de los comuneros, "de lo que nos prometieron dos años antes, dijeron que nada".
Los comuneros sostienen que les deben el canon desde hace cinco años, desde que es firme la sentencia que les da la titularidad de los terrenos, pero la Xunta les dijo que no, que les pagarían desde el momento en el que se firmase el nuevo acuerdo. En ese momento, la comunidad de montes decidió plantarse y les dijo que llegarían a un acuerdo, pero siempre que se firmase por escrito ya "porque si no, podríamos volver a estar esperando otros dos años".
"Dijeron que sí, pero no firmaron", explica Suso Castro, en alusión a una última conversación el pasado 17 de enero. Y ahí la paciencia de los comuneros se acabó y decidieron proceder al cierre del terreno. "Como titulares, podemos cerrar el acceso al terreno", sostiene, "la Xunta está de okupa, sin pagar el alquiler durante 5 años".
Pensaban haber cerrado ya el pasado domingo, día 28 de enero, pero sus abogados les recomendaro prudencia, darle 10 días de plazo a la Xunta para llegar a un acuerdo. Les enviaron un burofax y pidieron autorización a la Subdelegación del Gobierno para poder hacer la protesta, que se basa en que "las instalaciones no las podemos tocar, pero el terreno es nuestro, hay una persona que está ocupando nuestros terrenos y no paga".
Su intención es cerrar el acceso a los vehículos y dejarán pasar, pero solo a aquellos que les pidan autorización. "Como es nuestro, nadie nos lo puede impedir", sostienen. "Ya nos tomaron el pelo cinco años, por ahí no pasamos más", añade Suso Castro.
LA XUNTA, ABIERTA A NEGOCIAR
La Xunta de Galicia, a preguntas de PontevedraViva, explica que, en este momento, "estamos perfilando el camino tanto para instrumentalizar el canon como para avanzar con la ampliación". Así, indican que llevan tiempo trabajando en un proyecto de ampliación y mejora del CGTD que incluye nuevas instalaciones en Cernadiñas. Para ello se llevará a cabo un Proyecto de Interés Autonómico que aseguran que "está consensuado con los comuneros".
La Secretaría Xeral da por hecho que "firmaremos un contrato de cesión por lo que la solución a esta cuestión ya está muy avanzada".
Además, recalcar que a día de hoy, son algunos clubs los que hacen uso del terreno y son los únicos perjudicados de este conflicto que "se solucionará próximamente para beneficio de todos, especialmente, del deporte gallego".
LOS CLUBS, NEUTRALES
Una de las entidades que utiliza las instalaciones es el Club de Tiro de Precisión. Su presidente, Antonio Escudero, confía en la rápida resolución del conflicto. Ellos no se posicionan de un lado ni del otro, sino que "tenemos que ser neutrales", como administradores de las instalaciones, pero no propietarios. Los dueños del terreno son los comuneros y los del campo, la Xunta. Ellos solo administran.
"Va lento, pero estamos convencidos de que la Xunta lo solucionará", explica. "Están llamados a entenderse" mientras ellos se encuentran en medio, "con la incomodidad de sufrir las consecuencias", pero no quieren conflictos con ninguna de las partes.
Esperan que lleguen a entendimiento "por el bien del tiro", ya que es el único campo que hay en Pontevedra, en el que entrenan más de 900 tiradores de toda la provincia.