¿Tiene el Instituto Municipal de Deportes los días contados?
Esa es la pregunta que ha quedado en el aire este martes. Cada vez son más las voces que dudan de su operatividad y el gobierno municipal se ha comprometido a estudiar una mejor fórmula de gestión para el deporte pontevedrés. Así ha quedado de manifiesto en la primera reunión que celebra la junta rectora del IMD tras las recientes elecciones municipales del pasado 24 de mayo.
Y todo porque desde el PSdeG-PSOE, partido que tuvo la responsabilidad del área de Deportes en el anterior mandato, solicitó iniciar los trámites para la disolución del organismo al entender de que es "inoperativo e imprescindible", según Agustín Fernández. El portavoz socialista aseguró que tras cuatro años de gestión de la política deportiva municipal "entendín que o IMD é máis un atranco que unha solución".
Afirmó que este organismo no cumple los objetivos para los que fue creado en la década de los 90 y lamenta las "eivas" que tiene a nivel administrativo, debido a un presupuesto "constreñido" y no poder participar de las transferencias de crédito municipales; y a nivel laboral, ya que, además de la escasez de personal que presenta, las bajas no pueden ser cubiertas con las listas del ayuntamiento.
Por todo ello, el PSdeG-PSOE cree que lo mejor sería crear un Servicio Municipal de Deportes, lo que permitiría redimensionar una plantilla "que se queda corta para dar conta da enorme cantidade de eventos e actividades que se desenrolan ao longo do ano". Esto debería ir acompañado, dijo Fernández, de la constitución de un Consello Municipal do Deporte, que "dea voz" a los clubes de la ciudad en el diseño de la política deportiva.
RECEPTIVIDAD EN BNG Y PP
Desde el gobierno municipal, la concejala de Deportes destacó que "estamos abertos" a valorar la disolución del IMD y la creación de un nuevo servicio que permita que el deporte de la ciudad "funcione do mellor xeito posible". Anxos Riveiro reconoció que el organismo ha perdido gran parte de las atribuciones con las que se creó, como "funcionar como unha especie de padroado" y recibir ayudas económicas "externas e privadas".
En todo caso, la edil del BNG explicó que, tras resolver asuntos más urgentes como el nuevo contrato de las piscinas de Campolongo, "valoremos esa petición". Se trata, recordó, de algo que también se plantaron los nacionalistas "no seu momento", y avanzó que a lo largo del verano estudiarán "con calma" esta propuesta.
Por su parte, desde el Partido Popular "no veremos con malos ojos" que se reformule el IMD, pero con matices. "Entendemos que ha sido útil, pero con la actual demanda de equipos y el gran número de campeonatos que se organizan ya no sirve para dar resultado", afirmó el concejal César Abal. A los populares "nos gusta mucho" la posibilidad de crear una fundación, con un gerente al frente, que pueda atraer patrocinadores para el deporte pontevedrés.
Sea cual sea el modelo elegido, dijo, espera que se haga "sentando a todos" en la misma mesa, clubes incluidos, para poder decidir entre todos cuál puede ser la mejor fórmula de gestión para cubrir el hueco que dejaría la disolución del Instituto Municipal de Deportes.