La universidad quiere hacer visible el acoso sexual
Por Redacción
Obtener una radiografía de la realidad del acoso sexual, por razón de sexo y orientación sexual en la Universidad de Vigo con el objetivo último de prevenir y erradicar estos comportamientos en la institución académica. Con estos objetivos está desarrollándose un estudio pionero que, entre otras cuestiones, aborda la realización de una encuesta a más de 2.000 miembros de los diferentes colectivos que conforman la comunidad universitaria, tanto alumnado como personal docente e investigador y personal de administración y servicios.
"El acoso es una realidad a la que no podemos vivir de espaldas. Esto existe. Por lo tanto, hay que trabajar para prevenirlo y para combatirlo con las estrategias más eficaces posibles", destaca la investigadora María Lameiras de la Unidad de Igualdad del Grupo de Investigación en Sexualidad, Género y Salud.
Según explica Anabel G. Penín, directora de la Unidad de Igualdad, en el ámbito universitario "se reproducen los mismos comportamientos que en el resto de la sociedad, no somos lugares aislados, impermeables a las situaciones de acoso y violencia", por lo que destaca la pertinencia de llevar a cabo esta iniciativa.
El cuestionario es anónimo y confidencial, no hay respuestas correctas e incorrectas, lo que interesa es que manifiesten lo que piensan sobre este tema.
En la encuesta se pregunta a los participantes si alguna vez sufrieron en la universidad acoso sexual (que incluye cualquier comportamiento, verbal o físico, de naturaleza sexual que tenga el propósito o produzca el efecto de atentar contra la dignidad de una persona, en particular cuando se crea un entorno intimidatorio, degradante y/u ofensivo).
"Nos vamos a encontrar un número mayor de casos del que nos gustaría reconocer"
También si sufrieron acoso por razón de sexo (que incluye cualquier comportamiento realizado, de forma continua y sistemática, en función del sexo de una persona por ser mujer o pertenecer a otros colectivos llamados sexuales minoritarios, como homosexuales, lesbianas, transexuales o transgénero, que tenga el propósito o produzca el efecto de atentar contra la dignidad de una persona, en particular cuando se crea un entorno intimidatorio, degradante y/u ofensivo) o agresión sexual (considerar como tal comportamientos que, mediante violencia o intimidación en su realización y sin que exista un previo consentimiento de la víctima, atentan contra la libertad sexual de esta).
En la batería de preguntas tienen que responder a cuestiones diversas, desde si les tocaron alguna vez de forma no deseada hasta si fueron tratados de forma negativa por no ser "lo suficientemente masculino" o "lo suficientemente femenina".
Sobre los resultados, María Lameiras apunta que "no sabemos lo que nos vamos a encontrar. Lo que sí sabemos, habida cuenta las cifras que se manejan sobre acoso sexual en general, es que nos vamos a encontrar un número mayor de casos del que nos gustaría reconocer".