Lo que no devuelve Ryanair, lo compensan las familias de A Xunqueira II
Por Natalia Puga
La asociación de madres y padres de alumnos del instituto A Xunqueira II ha decidido suplir con su generosidad la falta de respuestas de la compañia aérea Ryanair en relación con el frustrado viaje de estudios a Londres de dos alumnas del centro a finales de enero. Las chicas, ambas de 18 años, no pudieron volar desde el aeropuerto de Porto (Portugal) junto a sus 29 compañeros por la negativa de la aerolínea y es a ellos a quien les han reclamado la devolución de los gastos del viaje. Han dado la callada por respuesta, pero las familias del centro han aprobado darles el dinero.
El presidente a la asociación, José Rabuñal, ha confirmado a PontevedraViva que este mismo miércoles se programó una reunión con los padres de las dos niñas afectadas para trasladarles esta decisión, que acordó la directiva de la Anpa. La idea es devolverle a cada una los 450 euros que gastaron en el viaje que no pudieron disfrutar, pues ya que se quedaron en tierra y disgustadas, al menos que no les genere un gasto para sus familias.
"Ya se quedaron sin viaje, que no se queden sin dinero", ha sido la premisa que les ha llevado a tomar esta decisión. Para ello usarán fondos propios del colectivo que, en caso contrario, habrían dedicado a otras actividades, pero consideran que este gasto es prioritario.
Una vez que los padres de las dos chicas, de origen marroquí y colombiano, acepten el dinero, se oficializará la entrega. Según Rabuñal, ellos le adelantarán el dinero y, en caso de que finalmente la compañía aérea reembolse algún gasto, lo recuperarán. Si Ryanair nunca llega a darle ni siquiera los billetes, de todas formas, "lo damos por bien hecho", pues la asociación considera que "lo de las chicas fue una injusticia".
Los tres profesores que acompañaban al grupo en el viaje, Xesús Constenla, María Jesús Castro y Ángeles Fernández, presentaron una reclamación en Ryanair en el propio aeropuerto portugués cuando negaron a las niñas poder volar y también cuando regresaron del viaje vía telemática. A mayores, presentaron una denuncia ante la policía portuguesa en Porto.
En sus reclamaciones les exigen que les devuelvan todo el dinero que habían pagado las dos alumnas por el viaje -450 euros por cabeza-, el coste del viaje a Pontevedra cuando no pudieron volar y se quedaron con una profesora que las acompañó de regreso a casa, el coste del nuevo vuelo de esa profesora porque tuvo que cambiarlo para no dejarlas solas en Portugal y una indemnización por los daños y perjuicios, pues, según sus profesores, "o máis doloroso foi o tratamento que nos deron". En caso de que ese dinero finalmente, llegue, los 450 euros se devolverán al ANPA.
El personal de Ryanair les negó poder volar porque tienen permiso de residencia de larga duración en España, pero nacionalidad colombiana y marroquí y, según ellos, necesitaban un visado especial. Las policías británica y portuguesa -los dos países entre los que era el vuelo- y la embajada británica en España, les aseguraron, sin embargo, que "los papeles estaban todos en regla".
Esos papeles son su pasaporte, el permiso de residencia y que estaban incluidas en una lista de viaje certificada por la dirección del centro. Todos esos documentos les servían para viajar sin necesidad de un visado, en especial este último de estar consideradas un grupo de estudios, tal y como recoge un dictamen del Consejo de Europa del año 1994.