Los pontevedreses sacan al otaku que llevan dentro
Por Oskar Viéitez
En nuestro vocabulario doméstico se está haciendo un hueco la palabra "otaku". El término alude al fan del cómic nipón y de todo lo referido a la cultura japonesa. Desde el más infantil ShinChan hasta Pokemon pasando por Inu Yasha o Evangelion.
No nos creamos ajenos a todo esto porque todos llevamos un otaku dentro. Marco y Heidi, eran manga, al igual que la cursi Candy Candy, y por supuesto, Mazinger Z. Otros títulos como Ranma o los Caballeros del Zodiaco popularizaron este género que para muchos se consagró con Akira. Sin embargo no es hasta el año 1992, con la aparición de la serie Dragon Ball, cuando la industria del manga en España se establece definitivamente, siempre de la mano de las series de televisión.
Pontevedra acogió durante el fin de semana las Jornadas de Manga y Anime que nacieron en el marco del programa juvenil Noites Abertas y que este año llegaron a su tercera edición.
La Casa Azul acogió diversas actividades pero la más divertida fue el cosplay, esto es disfrazarse como los personajes de ficción de los manga. Desde una simple gorra de la niña Arale, pasando por una placa con símbolos de la serie Naruto o un elaborado disfraz de la saga Final fantasy, el caso es divertirse.