Miguel Estévez, coronel jefe de la Guardia Civil: "Me partió el corazón el monstruo de Moraña que asesinó a sus dos niñas"
Por Diego Espiño & Cristina Saiz
Después de casi tres años al mando de la Comandancia de Pontevedra, el coronel jefe Miguel Estévez deja el cargo y hace balance de lo que ha sido su etapa como máximo responsable de la Guardia Civil en la provincia.
"He intentado mejorar la calidad de los servicios, la seguridad ciudadana y la seguridad de todos los pontevedreses", asegura.
Su paso por la jefatura la valora como "positiva", destacando éxitos como la operación contra el Clan de los Morones que supuso "una gran presión". También señala el trabajo realizado por la Guardia Civil de Pontevedra en asuntos como la pornografía infantil, el bullying o el sexting, en los que "tenemos una gran sensibilidad", o en otros como los relacionados con el narcotráfico.
Sin embargo, aunque la sensación es de haber realizado un buen trabajo, estos años han dejado alguna herida abierta. "Lo que me partió el corazón fue el monstruo de Moraña que asesinó a sus dos niñas", reconoce con pesar por no haber podido hacer nada más en ese caso, ya que "llegamos cuando ya se había producido el asesinato".
También en esta línea el coronel jefe señala la violencia de género como otro de los grandes puntos a mejorar entre todos, un asunto por el que "como hombre siento vergüenza ajena", declaró.
Tras dejar el cargo como máximo responsable de la Comandancia de la Guardia Civil en Pontevedra, en donde ha pasado gran parte de su carrera profesional, Miguel Estévez afronta ahora un nuevo reto a partir del 1 de septiembre, ser consejero del Ministerio de Interior en la embajada española de Chile. A ello se dedicará los próximos cuatro años, fecha en la que espera ingresar en la reserva y volver a la ciudad de Lérez para disfrutar de familia y amigos.
La vacante que deja su plaza debe ser ahora publicada en el Boletín Oficial de la Guardia Civil, estando previsto que se incorpore un nuevo coronel al puesto en "dos o tres meses".