Sigue en activo el protocolo de frío en la ciudad como respuesta a las bajas temperaturas
Febrero ha recibido la primera ola de frío del año con alertas en 27 provincias por bajas temperaturas en la península. Algunos municipios pontevedreses como A Lama o Lalín han visto su paisaje blanqueado por la nieve, con mínimas de -3 grados en el caso de éste último.
El protocolo de frío activado el pasado diciembre por el Concello se antoja más que necesario en un contexto tan gélido, sobre todo para aquellas personas sin hogar.
Así lo confirmó Anxos Riveiro, concelleira de Benestar Social Municipal, que recordaba el procedimiento habitual en este tipo de días especialmente duros. La Policía Local es la encargada de detectar a personas que duermen en la calle y recomendarles alguno de los centros de la Redeaxuda.
"Neste momento o albergue de Cáritas ten algunhas prazas libres e Calor y Café ten puntualmente alguna. En cuanto as mulleres, no caso de non haber sitio, dende o propio albergue en coordinación co Concello se trataría de remitilas a algún hostal que ten colaboración coa rede", explica.
Según datos de la consultora AIS Group, Pontevedra registraba el año pasado el mayor índice de pobreza anclada de Galicia. Esa realidad se refleja en las visitas a los comedores sociales y albergues de la ciudad. En 2016 eran 120 personas repartidas en dos turnos las que accedían al comedor de Cáritas, y 26 dormían a diario en los diferentes albergues de Pontevedra. Además, en ese mismo año la Cruz Vermella atendió a más de 7.000 pontevedreses en riesgo de exclusión.
La relación estrecha entre las entidades que conforman la red es una de las ventajas a la hora de planificar la actuación en futuras épocas de frío. Por ese motivo, la Redeaxuda ya se prepara desde inicios de año para cubrir las necesidades teniendo en cuenta los últimos cambios sociales que se vienen dando en todo el país. "O tema da pobreza enerxética volve a estar enriba da mesa. As familias prescinden moitas veces do calefactor porque se non hai cartos que entren de xeito continuado, tamén hai certos gastos que non se fan", indica Anxos Riveiro.
El aumento en el rango de edad de las personas que solicitan ayudas de emergencia, la crisis económica y la precariedad laboral han sido los temas abordados en la última reunión de la plataforma, la cual plantea establecer canales de comunicación con trabajadores sociales que puedan facilitar el acceso a nuevos perfiles de demandantes.