Instalan nuevos elementos de calmado de tráfico en el acceso al puente de Monte Porreiro
Por Redacción
La ausencia de lluvia durante los últimos días han permitido a la empresa EC Casas iniciar las obras de instalación de nuevos elementos de calmado de tráfico en el acceso del puente de Monte Porreiro, desde la rotonda de la intersección de la avenida Médico Ballina y la N-550.
Esta actuación, que ejecuta la Deputación de Pontevedra, había sido solicitada por el Concello después de constatar deficiencias en la carretera tras las quejas reiteradas de los vecinos y de los usuarios de la vía.
El servicio de Mobilidade de la Deputación realizó en su día una inspección y comprobó el estado de conservación deficiente de la vía por el borrado casi absoluto de las líneas longitudinales.
También advirtió que existían dos intersecciones con pasos de peatones que se estimaba conveniente proteger mediante actuaciones para la reducción de velocidad, ya que existía una situación de peligro de accidente para las personas usuarias.
Los operarios de la empresa están levantando un reductor de velocidad en el tramo entre la glorieta en la N-550 y la glorieta de la carretera a Campo Lameiro para sustituirlo por un paso de peatones sobreelevado, que facilitará el tránsito peatonal seguro a la hora de cruzar la carretera.
También se está instalando un reductor de velocidad en la entrada del siguiente tramo, que lleva al puente. Las dos construcciones están siendo pintadas para su correcta identificación por parte de conductores y viandantes.
Además de los elementos de calmado de tráfico, en el contrato también se incluye un desbroce de taludes en todo el recorrido, la mejora de la señalización vertical, la reposición de las pilonas de caucho del puente que están rotas y el tratamiento para marcar la senda peatonal y ciclista.
Los trabajos de la senda, sin embargo, no se podrán ejecutar de inmediato, ya que el material necesario para el tratamiento superficial en color rojo del itinerario -una mezcla bituminosa conocida como ' slurry'- no se puede aplicar ni con frío ni con lluvia y precisa varios días seguidos de buen tiempo para asentar correctamente y garantizar su durabilidad.
Esa situación obligará a esperar a la primavera para hacer la obra, corregir todas las deficiencias y entregar definitivamente el vial al Concello en buenas condiciones.