A juicio por abuso sexual por obligar a mantener relaciones a su sobrina con discapacidad durante tres años
Por Natalia Puga
Un hombre se sentará el próximo martes 29 de junio en el banquillo de los acusados de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra para rendir cuentas por un delito de abuso sexual que presuntamente cometió a lo largo de tres años, entre 2016 y 2019. La víctima es su sobrina, menor de edad y con una discapacidad del 42 %.
El caso procede del partido judicial de Caldas de Reis, si bien no se ha facilitado el municipio en el que ocurrieron los hechos y tampoco datos del acusado para evitar, de esta forma, la identificación de la víctima.
Los hechos salieron a la luz en 2019 después de que en un día sin determinar de los meses de septiembre o de octubre el acusado "con el ánimo de satisfacer sus deseos sexuales y de atentar contra la indemnidad sexual de la víctima", la penetró por vía vaginal y anal "pese a la negativa expresa de la menor".
La chica, según sostiene la Fiscalía, "le dijo que no quería hacer nada de lo que le propuso en el ámbito sexual", pero él la obligó a mantener relaciones. Ocurrió en la casa de la familia de la madre de la víctima y el acusado es su tío materno. Aprovechó que el resto de los integrantes de la familia estaba fuera de la vivienda ayudando con la recogida de la leña, subió con ella a su habitación y abusó de ella.
Tras salir a la luz ese caso, también se supo, según sostiene el fiscal, que en otras ocasiones anteriores entre los años 2016 y 2019 el acusado "efectuó otros actos de contenido sexual sobre su sobrina", tales como penetrarla vía vaginal, anal y bucal y obligar a la menor a masturbarlo.
Todo lo hizo "pese a que la menor de edad se negó expresamente a realizar estos actos de propósito libidinoso" y también le mostró en la pantalla de su teléfono móvil imágenes de contenido sexual en las que una mujer sin identificar se dejaba realizar actos de naturaleza sexual por un varón.
La Fiscalía atribuye al hombre un delito continuado de abusos sexuales a una menor agravado por la circunstancia de que "consistieron en el acceso carnal por la vía vaginal, anal o bucal, por el escaso desarrollo intelectual o físico de la víctima y por haberse prevalido el culpable de una relación de superioridad o parentesco".
Por estos hechos, pide que seas condenado a 10 años y seis meses de prisión y también que se le imponga pena de alejamiento o de prohibición de aproximación a la menor, a su domicilio y a su lugar de trabajo o a su centro de estudios a una distancia inferior a 300 metros y también la prohibición de comunicación con ella cualquier medio durante 18 años y seis meses.
Una vez que salga de prisión, pide que se le imponga la medida de libertad vigilada por una período de 10 años y la obligación de participar en un programa de educación sexual.
Asimismo, deberá indemnizar a la menor con 16.000 euros en concepto de reparación del daño moral o psicológico causado.