El tren, las carpas y la decoración natural marcaron una Navidad inolvidable
Por Redacción
Una vez finalizadas las fiestas navideñas, el Concello de Marín resalta el buen ambiente vivido en la villa, a pesar de la pandemia.
Fuentes municipales indican que desde el Concello se diseñó una programación "coa que poder ofrecer actividades adaptadas á situación, sen olvidar a necesidade que temos tamén de dinamizar a vila nunhas datas tan relevantes coma estas".
El balance que hace el gobierno local de este tiempo es muy positivo. Según los cálculos recogidos a lo largo de todas las fiestas, por el Tren de Nadal pasaron aproximadamente 15.000 personas, con una media cercana a las 500 personas al día durante el mes que estuvo funcionando. Cada jornada, el tren hacía 14 viajes con un aforo máximo de 50 viajeros.
Por su parte, de nuevo, las carpas Engado Marín fueron un gran éxito, tanto la del Parque Eguren, pensada para la juventud a partir de 11 años, como la de la Alameda, para los más pequeños. Ambas estuvieron 22 días abiertas.
En la carpa de los mayores se calcula que hubo una afluenecia de 6.600 personas, mientras que en la de la Alameda fue cercana a los 8.800 niños y niñas. En este último caso, se repartió el aforo en turnos día a día, para que pudiera haber un control del tiempo de juego y del número de personas dentro de la carpa.
NUEVA DECORACIÓN NAVIDEÑA
Otro gran atractivo de estas fiestas es la decoración, que contó con algunas novedades, como el paraguas de luz de la Plaza de España, o las tiras de bombillas LED que se colocaron en los árboles de la Alameda.
Además de las luces, se colocaron estaciones decorativas en distintos puntos del casco urbano, para las que se utilizaron "materiais naturais, sobre todo madeira e outros elementos, para insistir na sostibilidade e a calidade do natural fronte ao artificial", informan desde el gobierno local.