Usa como excusa la pandemia para justificar una estafa en la venta de ropa y calzado a través de Facebook
Por Natalia Puga
Una vecina de Pontevedra ha acabado convirtiéndose en víctima de un delito de estafa tras haber comprado diversas prendas de ropa y calzado deportivo que a una mujer que los anunciaba para su venta a través de Facebook.
La víctima llegó a realizar diez transferencias por valor de 754 euros sin llegar a recibir ningún objeto de todos los comprados.
Estos hechos acabaron en el juzgado y la estafadora acabó condenada primero por el Juzgado de lo Penal número 1 de Pontevedra y luego por la sección segunda de la Audiencia Provincial.
La condenada deberá cumplir ocho meses de prisión y, además, devolver a su víctima 755 euros en concepto de responsabilidad civil.
A la hora de recurrir la primera sentencia, la condenada llegó a justificarse amparándose en la situación de pandemia y echando la culpa a la propia víctima.
Así, argumentó que, en realidad, aquí no había una estafa, sino un incumplimiento contractual, pues ella "quiso en todo momento entregar la mercancía y/o devolverle el dinero", pero "la llegada de la pandemia del Covid-19 y otros hechos lo hicieron imposible".
El recurso presentado por la acusada a la sentencia original, rechazado por la Audiencia, también echa la culpa a la propia víctima, pues considera que "no tomó las suficientes precauciones" en cuanto "realizó varias transferencias sin que le llegara la mercancía solicitada".
Los hechos ocurrieron entre el 21 de enero y el 4 de febrero de 2019. La ahora víctima se interesó por las prendas que las prendas y el calzado que ofertaba la ya condenada por Facebook y "confiando en la veracidad de la oferta", se puso en contacto con ella y pactaron la compra y el correspondiente pago.
Algunas de las transferencias fueron de pequeño importante, 20 o 25 euros, y alguna alcanzó los 200. Entre la primera transferencia y la última pasaron dos semanas.
La acusada, según recoge la sentencia condenatorio, "con ánimo de obtener un beneficio económico ilícito", hizo suyo el dinero ingresado en su cuenta y no entregó las prendas. Cuando el caso llegó a juicio en el año 2022, seguía sin enviarle nada.