El ropero de Cáritas viste a más seis mil pontevedreses
Por Redacción
Esta semana abrió de nuevo sus puertas el ropero que atiende Cáritas Interparroquial en su sede de Joaquín Costa. Este servicio permaneció cerrado durante las obras de reforma que se han acometido en el local.
Amalia Otero, directora del ropero de Cáritas Interparroquial, explicó que "la obra que se hizo fue obligada por la Xunta para aislar el local en caso de incendio y al mismo tiempo dejarlo accesible para personas con problemas de movilidad reducida".
Amalia valoró la reforma como "muy necesaria, porque hay mucha ropa y poco espacio" y es que también se aprovechó la reforma para aumentar la capacidad del ropero.
Cáritas interparroquial de Pontevedra atiende anualmente a más de dos mil personas que acuden en nombre de sus familias para solicitar ropa. Según los cálculos de esta entidad son más de seis mil las personas que se visten gracias al ropero de Cáritas.
Esta portavoz recordó que el horario de apertura del ropero es de lunes a viernes por la mañana de 9 a 14:00 horas y los días de recogida de ropa son los martes y los jueves por la mañana y miércoles por la tarde. "Recojemos todo tipo de ropa, preferiblemente que esté limpia, luego la repartimos a todas las personas que tengan necesidad, generalmente familias con niños, bastantes de ellos inmigrantes", indicó Amalia Otero.
"Aumentó la demanda pero también los donativos, de ropa y en metálico. Vemos que la gente está concienciada"
La crisis ha forzado a los voluntarios de Cáritas a aumentar sus horarios para atender a las familias en situación de necesidad. "La demanda aumentó mucho, aunque también sabemos de mucha gente que no acude por vergüenza", y añadió "aumentó la demanda pero también los donativos, de ropa y en metálico. Vemos que la gente está concienciada", afirmó.
Entre los donativos hay alguna ropa que se destina al reciclaje pero también ropa "francamente buena". Entre los artículos más demandados figuran los pañales "siempre son muy necesarios", y el calzado infantil, "sobre todo para niños de siete y para chavales de 13-14 años, es el que más escasea". Lo que más salida tienen son los chándales.