El Gran Wyoming triunfa en Pontevedra con su humor mordaz y su vena rockera con Los Insolventes
Por Diego Torrado
Imprevisible. Es el calificativo que mejor define el concierto que El Gran Wyoming ofreció este viernes en Pontevedra. Llegaba a la Sala Karma con su banda habitual, Los Insolventes, y una vez más entusiasmó a los numerosos seguidores que llenaron el local.
Fue un espectáculo que ellos mismos definieron como talk-rock, a medio camino entre la sorna de autor y el rock and roll de incendiario octanaje. En él, El Gran Wyoming como maestro de ceremonias dio rienda suelta a su humor mordaz e irónico, conocido especialmente por su trabajo en programas de televisión como Caiga quien caiga o, actualmente, El intermedio.
José Miguel Monzón, el nombre real del artista madrileño, estuvo acompañado sobre el escenario por Miguel Ángel Ariza, José Alberto Solís, Luis de Diego y Manolo Villalta (Los Insolventes), con los que lleva recorriendo todo el país desde que se conocieran en una sala madrileña allá por el año 2009.
Desde entonces rescatan en cada uno de sus conciertos grandes clásicos de la historia del rock. Y en Pontevedra no hicieron una excepción. Sonaron canciones de Chuck Berry a Jet, pasando por The Who, Rory Gallagher, Frank Zappa, Siniestro Total, Leño, Jet o Ramones.
Y gracias a todo ello lograron su objetivo, que no era otro que transmitirle al público las buenas vibraciones que tienen ellos sobre el escenario, mostrando la otra cara de El Gran Wyoming a ritmo de guitarras. Lo hicieron con carisma y profesionalidad, dejando a sus seguidores pontevedreses con ganas de más.