‘Pop-up. Libros Móbiles e despregables’ muestra ejemplares únicos en el Museo
Por Cristina Saiz & María José Pita
El edificio Castelao del Museo de Pontevedra acoge una exposición compuesta por alrededor de un centenar de ejemplares de libros móviles y desplegables, que ofrece una visión sobre una técnica cuyo uso se remonta al siglo XIII, cuando se tiene referencia de que el mallorquín Ramón Llull introdujo por primera vez elementos mecánicos de papel en un libro.
"Presentamos a través desta exposición unha selección de libros animados que constitúen pequenos tesouros bibliográficos polo seu valor histórico e artístico", señaló el director del Museo de Pontevedra, José Manuel Rey, al inaugurar la muestra ‘Pop-up. Libros Móbiles e despregables’ abierta desde este jueves 29 de julio y hasta a 12 de octubre .
A través de una selección de los más de 2.200 libros pop-up que forman la colección que los palentinos Ana María Ortega Palacios y Álvaro Gutiérrez Baños reunieron durante 30 años, se busca mostrar la historia de estos formatos. "La intención es que el visitante sepa cuál fue su origen, cómo evolucionaron, cómo funcionan y de qué tratan, ya que no se reducen solamente a cuentos infantiles", explicaron los propietarios y también comisarios de la exposición.
Las personas que se acerquen a la sala 1 del edificio Castelao podrán realizar un recorrido a través de estas piezas organizadas cronológicamente, partiendo de un original del siglo XVII hasta las actuales propuestas del norteamericano Robert Sabuda, autor del que se muestran ediciones limitadas y firmadas en las que combina el plegado, la papiroflexia integrada en el libro y el ensamblaje con cuerdas.
Especial atención reciben también los artistas Ernest Nister, Raphael Tuck y Lothar Meggendorfer por su destacado papel en la época dorada de estos volúmenes, datada a finales del siglo XIX. De hecho, "el auténtico tesoro de nuestra colección, y que exhibimos aquí, es una pieza de Lothar Meggendorfer, de la que solo existen dos ejemplares en el mundo", apuntaron los comisarios. Se trata de ‘Le gran cirque international’, una obra hecha en París en el año 1887.
Tras esa etapa álgida, la primera y segunda guerras mundiales supusieron, ya en el siglo XX, un freno en la producción de estos libros, aunque no desaparecieron totalmente al sustituir a los juguetes en una época de carencias. Posteriormente, el auge de los pop- up comenzó en los años 60 en Checoslovaquia con Vojtech Kubasta y, en la actualidad "fálase dunha segunda idade de ouro con obras de enxeñería en papel impresionantes", destacó el director del Museo.
La selección de piezas refleja también las distintas técnicas empleadas en su elaboración, como solapas, lengüeta, persianas, acordeóns, teatriños, carruseles, entre otros. Además, en los textos y audiovisuales que acompañan a la muestra se explica el proceso de ensamblaje final que pasa necesariamente por labores manuales realizadas en las últimas décadas en Colombia, Ecuador y México, y que en la actualidad fue asumida por mano de obra de China.
"El ingeniero de papel es el responsable de concebir este mecanismo que después se hará tridimensional" con el trabajo manual de reproducción de un determinado número de ejemplares, apuntó Álvaro Gutiérrez, quien añadió que hoy por fortuna hay un movimiento por parte de los artistas para exigir a los talleres condiciones de trabajo dignas y no uso de mano de obra infantil, lo que implicará que en los próximos años las obras encarezcan notablemente su coste.
En la muestra podrán verse ejemplos de publicaciones elaboradas con tridimesionalidad sobre naturaleza, pintura, arquitectura, ingeniería, teatro, cine, vehículos, aviones, barcos, arquitectura o cuentos. "A necesaria presentación en vitrinas de todos estes volumes fai que se perda o movemento, cuestión que suplimos con audiovisuais nos que se pode ver o funcionamento dos exemplares", añadió José Manuel Rey.
CATÁLOGO Y TALLERES
Con el inicio de la muestra, el director del Museo hizo también la presentación del catálogo editado por la institución museística, que incluye las imágenes y la historia de algunas de las piezas más importantes de las que conforman la exposición y que puede adquirirse en la recepción del edificio Castelao o consultarse en la sala de investigación ubicada en el edificio Fernández López.
Por otra parte, el director del Museo adelantó que en unos días el departamento de Educación abrirá la inscripción para participar en los talleres relacionados con los libros desplegables y que estarán dirigidos a público infantil.
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