Ramiro Espiño
El ruido y las nueces
"Mucho ruido y pocas nueces". Una expresión o dicho popular utilizada frecuentemente por los españoles, si bien su origen se debe a la obra de William Shakespeare "Much Ado About Nothing", luego llevada al cine adaptada y dirigida por Kenneth Branagh. Se trata de una comedia romántica, que nada tiene que ver con la utilización posterior que le damos para referirnos a algo.
Pero a pesar de ese antecedente británico, en España se explica su procedencia en algo sucedido casi en las mismas fechas que la citada obra, a finales del siglo XVI, concretamente, según cuenta el conde de Clonard, en 1597, cuando las tropas españolas tomaron la ciudad de Amiens merced a una treta urdida por el capitán Hernán Tello de Portocarrero, que vistió de labradores a dieciséis de sus soldados que hablaban muy bien en francés.
Estos hombres penetraron en la ciudad provistos de sacos de nueces, cestos de manzanas y un carro de heno. Apenas entraron en la ciudad, uno de los soldados dejó caer voluntariamente uno de los sacos de nueces, lo que movió a los soldados franceses a recoger las nueces del piso. Esta situación permitió a los españoles que sacaran sus armas de la carreta de heno y así reducir a las tropas locales para permitir el ingreso de una columna invasora.
Posteriormente, los franceses recobraron la plaza, pero la astucia de la estratagema habrían dado origen al dicho ser más el ruido que las nueces.
Con el correr del tiempo, la frase pasó a ser parte del uso popular, como manifestación de exagerada demostración de un hecho que no tiene tanta trascendencia. Es decir, que a pesar de haber un gran alboroto o revolución, al final no hay ningún resultado real ni positivo, se hace mucho ruido pero al final se queda en nada, todo es artificio.
Hecha esta introducción histórica (o no, vaya usted a saber), apliquemos el cuento a la situación actual del Pontevedra. Inmerso desde hace tiempo en algo parecido (mucho ruido, pero pocas nueces) desde hoy pasa a tener ambas cosas: ruido y nueces.
Porque si se para uno a pensar, lo sucedido ha sido muy parecido. Se dejan caer unas nueces, se hace bastante ruido, y cuando algunos que se postulaban quieren darse cuenta, les han pillado con el carrito del helado (y no es la primera vez).
Ayer domingo, en Portugalete, los jugadores, el cuerpo técnico, aportaron "nueces". Generaron una ilusión como hace mucho tiempo no se respiraba en torno al equipo granate. Se habló de fútbol.
Hoy lunes, en Pasarón, se anunció haber cubierto la ampliación de capital necesaria para sacar a la entidad de la causa de disolución en la que estaba inmersa, saneando su situación económica (o eso cabe esperar), confiemos en que de forma definitiva. Se hizo "ruido".
¿Era el mejor momento para ese anuncio, haciendo sombra de alguna manera al éxito deportivo y a lo que está por venir? Puede que no. Quizás, no lo sé, se debería haber esperado. Mantener la noticia en una prudente nevera para no desviar la atención. No hacer más "ruido" que el estrictamente deportivo
Otra cosa es que las "nueces" (el dinero aportado) son siempre bienvenidas, especialmente porque se necesitaban para "comer", pero el "ruido" no llega en el mejor momento, cuando toda la atención es poca para que lo deportivo sea el eje único de todos los granates.
Pero como la situación es la que es, yo me atrevería a pedir a los que han hecho el "ruido", pero también han aportado las "nueces" (o sea, a su "capitán Hernán Tello de Portocarrero"), que desde ahora mismo intenten unir también los pedacitos dispersos del granatismo y no desaprovechen la ilusión que ha conseguido generar el equipo para devolver al club el prestigio y la categoría perdida.
A los otros, a los que sin dejar de hacer "ruido" no han sabido, no han querido o no han podido aportar "nueces", que pongan de su parte lo que corresponda para terminar con las luchas "cainitas", y de una vez por todas se reme en una sóla dirección.
Y otra petición, esta para todos. Nacida desde el amor y la pasión que muchos sentimos por el Pontevedra CF: que a partir de ahora mismo haya "nueces" y se deje de hacer "ruido".