Retiran las denuncias contra el Polígono de Barro-Meis al conseguir los vecinos que ENCE no se instale allí
Por Oskar Viéitez
La Deputación de Pontevedra ha firmado un acuerdo con los vecinos y comunidades de montes por el cual éstos renuncian al proceso judicial iniciado contra el polígono de Barro-Meis tras el compromiso de la institución provincial a que ENCE nunca se instale allí.
Rubrican este Protocolo de Actuaciones, por una parte, la Deputación y el Concello de Barro, y por otra, las comunidades de montes de Curro, Agudelo y A Portela junto a los 95 vecinos que en su día recurrieron ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) el Plan de Sectorización del Polígono industrial de Barro-Meis.
Los vecinos renuncian a personarse en el recurso de casación que el Concello de Barro interpuso ante el Supremo, al entender que la sentencia emitida en su día por el TSXG era contraria a derecho. Asimismo los demandantes renuncian también a exigir el cumplimiento de la mencionada sentencia.
En su día, estos 95 vecinos recurrieron la aprobación del Plan de Sectorización de Barro-Meis ante el TSXG, que lo anuló.
Según destacó el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, la firma del acuerdo otorga "plena seguridad jurídica" al polígono de Barro-Meis, de tal manera que "las empresas que eran reticentes pueden ya instalarse con todas las garantías legales".
A cambio de la renuncia vecinal las instituciones garantizan que la implantación de empresas en el polígono industrial de Barro-Meis será "respetuosa con el medio ambiente y con la economía sostenible".
En concreto, el alcalde de Barro, José Antonio Landín Eirín, explicó que la denuncia de los vecinos nace a raíz de unas declaraciones del conselleiro de Industria en el anterior gobierno de la Xunta, Fernando Blanco, "cuando se le ocurrió decir que el mejor emplazamiento para ENCE sería Barro-Meis".
"Algunos, el noventa por ciento, no tenían ni puta idea de lo que firmaron y con ese poder se hizo lo que se quiso", dice el alcalde de Barro.
Según Landín Eirín, "los mismos que te ponen la verruga, te mandan al santo" y desde el Bloque Nacionalista Galego, con la "excusa" de la implantación de ENCE movilizaron a los vecinos en contra de este proyecto. "Algunos, el noventa por ciento, no tenían ni puta idea de lo que firmaron y con ese poder se hizo lo que se quiso", afirmó el alcalde de Barro "cuando lo único que querían es que no fuese Celulosas".
De tal manera que en el acuerdo firmado hoy se hace constar expresamente que no se radicarán en él "actividades industriales de potencial peligrosidad o de afectación al medio ambiente".
Para acotar más la restricción que demandaban los vecinos se detalla que no habrá industrias contaminantes pues se impedirá el establecimiento de "empresas que estén sometidas a la Declaración de Impacto Ambiental, como fabricación de pasta de papel, producción y tratamiento de celulosas y otras similares".
Salvado este escollo los vecinos coinciden al valorar a este polígono como una "actuación estratégica de innegable interés público y de gran importancia socioeconómica para los intereses de la comarca" pues creará puestos de trabajo y generará riqueza.