Edificios destrozados y coches dañados por la rotura de un depósito de agua en San Vicente do Mar
Por Natalia Puga
Creada y actualizada
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La rotura del depósito municipal de agua de San Vicente do Mar, en O Grove, ha provocado este viernes importantes destrozos en vehículos y edificios de una urbanización.
Poco antes de las doce de la mañana se tuvo constancia de la rotura del depósito que contenia unos 800 metros cúbicos de agua, que provocó una riada que se llevó por delante todo lo que encontró. Así, arrastró varios vehículos que estaban estacionados en la zona y causó importantes daños materiales en varios edificios.
Fuentes oficiales de la Subdelegación del Gobierno han indicado que se han visto afectadas unas seis viviendas y cuatro vehículos y que todos los bajos afectados estaban deshabitados en el momento de la rotura. De todas formas, se está a la espera que medios técnicos accedan a las viviendas para certificar que no había nadie en su interior, ya que están muy afectadas.
Según informa el Centro de Atención de Emerxencias de Galicia 112, se registraron importantes daños materiales e incluso estructurales en un edificio próximo. En concreto, quedaron completamente arrasadas por el agua la primera y segunda planta de un inmueble que estaba justo frente al depósito.
Desde el Concello de O Grove indican que el depósito de agua derribado estaba a un lado del transformador eléctrico y que, de momento, se desconocen las causas de este incidente. El depósito llevaba muchos años sin uso y se había incluido en la cesión de elementos públicos realizada el pasado año al Concello. Todo parece indicar que el problema puede venir dado por algún desplazamiento de tierras en esa misma zona.
Asimismo, se generó una gran balsa de agua que cortó el carril derecho de la carretera PO-317 durante más de una hora, quedando restablecida la circulación sobre la una del mediodía, según fuentes de la Guardia Civil.
Los edificios afectados están ubicados en la parcela 24 de los Edificios A Estrada de la urbanización de San Vicente do Mar y han resultado especialmente dañadas las viviendas de dos de los tres portales del bloque. La acción del agua arrasó las paredes y destrozó el interior de los inmuebles.
El alcalde de O Grove, José Antonio Cacabelos, ha informado que los técnicos revisaron las estructuras tanto del depósito como del edificio descartando la existencia de peligro por lo que han dado luz verde a las tareas de desescombro y a la canalización del abastecimiento de agua a las viviendas de la zona mediante los tres depósitos existentes.
"Esta urbanización por unha sentenza xudicial se nos obligou a recepcionala ao Concello do Grove cando nos viñamos advertindo que era unha urbanización moi antiga que non tiña as garantías de actuacións de mantemento", ha recordado el alcalde.
Mientras se evalúan los "cuantiosos danos materiais producidos" Cacabelos ha destacado que lo importante es que no existan daños a las personas.
El incidente ha movilizado hasta San Vicente a la patrulla de seguridad ciudadana de la Guardia Civil de O Grove, efectivos de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra, que reguló el tráfico, y efectivos del Servicio Local de Emergencias, de los Bomberos de Ribadumia y la Policía Local de O Grove.
Los edificios afectados albergan fundamentalmente segundas residencias, de modo que en el momento de la rotura del depósito estaban prácticamente vacíos y, en principio, no hubo que lamentar daños personales.
La situación causó mucha alarma entre los vecinos de la zona, que poco antes de este mediodía comenzaron a llamar al 112 Galicia para advertir de una especie de tromba de agua que llevó por delante vehículos y casas. Posteriormente, ya precisaron que nada tenía que ver con la lluvia, sino con un depósito de agua que había roto en una urbanización ubicada en la calle Sálvora.
El 112 recibió información de los técnicos de la empresa suministradora de la energía eléctrica, ya que, a consecuencia de la rotura del depósito, también resultaron dañados postes y cables de la luz.
De momento, los equipos de emergencias continúan trabajando en el punto con la retirada de los restos, por eso, falta por hacer una estimación global de los daños causados. El alcalde y el personal técnico del Concello se desplazaron al lugar para valorar los daños, junto con los cuerpos de seguridad.
Técnicos municipales procedieron a apuntalar algunas de las columnas que aún permanecen en pie para evitar más derribos.