Fernández Abraldes, sin miedo al bipartito con el PSOE tras perder la mayoría absoluta: "Xa estivemos catro anos e funcionou correctamente"
Por Natalia Puga
Xosé Manuel Fernández Abraldes seguirá siendo alcalde de Barro los próximos cuatro años con el BNG, pero con distintas reglas del juego que en el último mandato, pues ha perdido la mayoría absoluta y está abocado a negociar con el PSOE para gobernar. Esas negociaciones todavía no han empezado, pero, en todo caso, él no les tiene miedo, pues entre 2015 y 2018 nacionalistas y socialistas ya gobernaron en coalición.
El nacionalista señala que en los próximos días "falaremos a ver a posibilidade de acordo", pero de momento él y el líder del PSOE, José Sanmartín, no han establecido más contactos que haberse felicitado mutuamente en la noche electoral.
En 2015 las negociaciones fueron rápidas porque "era algo moi evidente", la necesidad de negociar porque, por primera vez, el PP perdía la alcaldía de Barro, pero "agora non hai esa urxencia".
En cualquier caso, asegura que no tiene ningún miedo ni a esas negociaciones ni al gobierno en coalición, pues "xa estivemos catro anos e funcionou correctamente". Ya ha gobernado de las dos formas, en solitario y con el PSOE.
Abraldes reconoce que le habría gustado haber conservado la mayoría absoluta, que perdió al bajar de seis a cinco concejales pero se muestra igualmente "moi agradecido" por haber podido ser la primera fuerza en el municipio.
Sobre los motivos de esa bajada de votos, le encuentra "certa explicación", pero desconoce "cales son as raíces", pues, en último término, el voto es libre y secreto.
Esa explicación que le han encontrado es que en 2019 los votantes de Barro participaron de forma más activa porque había "medo" a que el PP recuperase la alcaldía. Hubo parroquias en las que la participación superó el 83% "por ese medo e esa tensión que había que era posible" perder el Gobierno.
Sin embargo, este 2023 había mayor tranquilidad entre la ciudadanía. Lo detectaron en la campaña electoral, en la que vivieron que sus votantes no estaban "tensionados" como en 2019.
Es la única explicación que le encuentran porque asegura que durante el último mandato "non houbo conflicto nin nada importante" que justificase una pérdida de votos.
El PSdeG de José Sanmartín fue segunda fuerza al pasar de uno a 3 concejales. El tercer puesto fue para Xuntos por Barro del exalcalde José Antonio Landín Eirín, partido que se estrenaba en estos comicios y logró 2 concejales. En cuarto y último lugar el PP de Eduardo Ruadas que solo logró un concejal de los cuatro de 2019.
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