A la tercera, tampoco hubo juicio
Por Oskar Viéitez
Ya llevábamos desde el año 2011 con este caso de abusos sexuales a una menor.
Es la tercera vez en la que los menores, acompañados de sus padres vienen desde Crecente hasta la Audiencia de Pontevedra para acudir a un juicio que nunca se celebra.
En esta ocasión, a diferencia de las anteriores, sí que estaba el acusado. Pero fue su abogado el que faltó a la cita. Estaba enfermo.
El acusado es José Luis F.V., acudió tras ser detenido por la Guardia Civil, a instancias del juez, aunque no se encuentra en prisión. Este vecino de la localidad pontevedresa de Crecente, al que se le imputa haber realizado tocamientos a una menor de 12 años en julio de 2010 será juzgado el 29 de enero en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra. Si no hay ninguna incidencia más.
El letrado de la defensa a última hora presentó un escrito solicitando el aplazamiento de la sesión alegando una baja médica.
El abogado de la acusación, Marcos Martíns López, lamentaba que "se nos hizo venir hasta aquí sabiendo que no se podía celebrar el juicio, por lo que estamos bastante enfadados".
Los familiares y los niños, la afectada y tres testigos, han perdido una jornada de trabajo y de colegio, y además son gastos, recordó su abogado, Marcos Martíns. En todo caso lo que más les preocupa es "el estrés que genera el tener que revivir todo lo ocurrido".
El representante legar de la menor afirmó que la niña estuvo en tratamiento psicológico, y tiene secuelas de estrés postraumático.
Este juicio tenía que haberse celebrado el pasado mes de junio.
El fiscal pidió medidas disciplinarias contra el letrado de la defensa.
Según relata el escrito de acusación de la Fiscalía, el acusado se habría acercado a la menor durante las fiestas que se celebraban en la Plaza da Carballeira, en Albeos (Crecente). Explica que "con la finalidad de procurarse satisfacción sexual", introdujo una pelota de tenis en el interior del jersey de la niña, tras lo cual le realizó una serie de tocamientos en sus pechos.
Por ello, el Ministerio Fiscal sostiene que estos hechos son legalmente constitutivos de un delito de abuso a un menor y solicita cuatro años de prisión para él.