Guillermo García de la Riega Bellver
Mis Señas de Identidad: El Idioma I
La teoría gallega tuvo un problema fundamental a la hora de valorar mi posible origen gallego.
El problema no fue otro que la falsa acusación de falsificación documental por parte de Celso García de la Riega, algo vergonzoso, pero a partir del año 2013 con el estudio de los documentos por parte del IPCE se solucionó, posteriormente, 2017, se llevó una ponencia al Congreso Internacional del Papel, María Pilar Rodríguez Suárez Mercedes Vázquez Bertomeu, con el estudio Paleográfico y Diplomático de los documentos de Celso García de la Riega, en donde también se verificó su autenticidad. Pero el mal ya estaba hecho 100 años con la losa de la falsificación no se superan fácilmente.
A causa de esta acusación, en los diversos estudios realizados por Filólogos, nacionales, casi nunca se contempló la posibilidad de que mi idioma materno pudiera ser el gallego, excepto estudiosos gallegos como: el Padre Aureliano Pardo, Francisco Romero Lema, José-Martinho Montero Santalha, Méndez Ferrin o Antonio Gil Hernández, de Valladolid, pero afincado en Galicia y especialista en gallego.
El primero en realizar un estudio sobre mi idioma fue Ramón Menéndez Pidal, A Coruña, a pesar de ser gallego no le dio ninguna posibilidad a que yo fuera gallego, la explicación puede estar en que formó parte de las primeras comisiones de la Real Academia de la Historia, encargada de evaluar la autenticidad de los documentos aportados por Celso García de la Riega, de hecho en el estudio censura a todos aquellos que pierden el tiempo con un Colón español.
Menéndez Pidal en su estudio, publicado en 1942, se inclina por un Colón genovés, su argumento era que yo salí de Genova con 23 años, 1473, hablando italiano o el dialecto genovés, muy parecido al italiano, pero sin saber escribir, cuando llegué a Portugal aprendí un poco de portugués hablado, pero no escrito, según parece me dediqué a estudiar y practicar el castellano escrito, tras esta idea fueron todos los estudios posteriores. Menéndez Pidal alega que mi escritura esta llena de lusismos e insiste en que no son galleguismos.
Méndez Ferrin: escritor gallego, Licenciado en Filosofía y Letras en la Complutense, Presidente de la Real Academia Galega, 2010-2013, escribió sobre el informe de Menéndez Pidal: "Os argumentos que poden utilizarse para situar en Pontevedra a patria de Colón son bons. Mesmo son moi convincentes. Pero existe unha casta de tímidos, de galegos encolleitos que ainda andan atemorizados por un dictame precipitado e pouco científico da Academia da Historia [...]. Son os mesmos galegos cultos que aceitan, con naturalidade, as barbaridades que Menéndez Pidal escribiu sobre o idioma de Cristóbal Colón" (Xosé Luís Méndez Ferrín, Faro de Vigo (Faro del Lunes) (Vigo, 17 de Novembro de 1986).
La gran debilidad de la teoría genovesa es el idioma, bueno esta y otras muchas, no dan una explicación clara a la falta de escritos italianos en mis cartas ni siquiera a mis amigos genoveses, florentinos, venecianos con los que en algún momento de mi vida trabajé en Portugal y en Castilla, tampoco en las notas marginales de los libros italianos, que las escribo en castellano, un ejemplo claro es "Historia rerum ubique gestarum de Eneas Silvio (Pió II), edición de Venecia 1477", o el caso de unas anotaciones en los márgenes de un libro que leía en italiano, la Historia di Plinio, tradocto por Christoforo Landino. "Las notas repiten al margen en español las mismísimas palabras italianas del texto impreso". Esto si que es raro, pero parece que a nadie le llama la atención. ¿Para qué iba yo a traducir las palabras italianas al castellano?, se supone que sabía italiano, lo más lógico es que el italiano fuera un idioma extranjero que necesitaba traducir para acordarme de alguna frase o párrafo importante.
Esta situación sobre mi origen italiano plantea algunas preguntas y algún razonamiento: ¿Qué sentido tiene aprender castellano en Portugal sin saber si voy a residir alguna vez en Castilla? ¿Qué sentido tiene que yo no tratara de entenderme en su idioma con mi mujer Felipa Moñiz? Desde el momento que me casé con ella yo era ciudadano portugués, lo más normal es que aprendiera el idioma del país que me acoge, tanto hablado como escrito.
Siendo mi intención el presentar mi proyecto al Rey de Portugal, lo adecuado sería que supiera expresarme bien tanto en portugués hablado como escrito. Portugal en aquellos tiempos era una potencia marítima, si yo conseguía la aprobación de mi proyecto tendría que saber entenderme con la marinería y escribir en portugués el diario de abordo.
Yo creo que muchos estudiosos de mi escritura e idioma no se han hecho una pregunta básica que podría orientar el camino de sus estudios, ¿Qué idioma podría entenderse bien con el portugués y con el castellano?, ¿Qué idioma podría tener palabras comunes portuguesas, castellanas y a la vez diferenciadas? La respuesta es clara el GALLEGO.
Todos los estudios filológicos posteriores a Menéndez Pidal siguen sus lineas de investigación, que mi escritura castellana contenía lusismos, catalanismos o derivaciones franceses, o italianas, es decir, cualquiera menos galleguismos. Si esto es así como es que en mis escritos aparecen palabras, exclusivas, gallegas: DEPRENDER, castellano aprender al igual que portugués; DESPOIS, en cast: después y en port: depoís; LEXOS, en cast: lejos y en port: longe; FAME, en cast: hambre en port: fome; CONGOXA, en cast: tristeza, angustia, al igual que en portugués; NON, en cast: no en port: nom; FORZA, cast: fuerza en port: força......
Supongamos que mi origen es italiano. Yo preguntaría ¿Por qué no hay ningún topónimo italiano en las costas americanas?, los nombres dados por mi en las costas la mayoría son gallegos, y la siguiente sería ¿Qué explicación tiene que aparezcan palabras exclusivas gallegas, en mis escritos, y topónimos gallegos? ¿dónde los obtuve? ¿Cómo llegaron a mí conocimiento? O lo dejamos todo a una tremenda casualidad.
Continuará