Los padres del Froebel quieren que la Xunta se disculpe con ellos
Por Oskar Viéitez
Los padres del colegio Froebel que este jueves acudieron con intención "pacífica" al edificio de la Xunta en Campolongo, ante el "abusivo y denigrante trato recibido" por parte de la Policía Autonómica, esperan recibir "algún tipo de disculpa por parte de la administración".
Este jueves, 18 de junio, por iniciativa de la Asociación de Madres y Padres (ANPA) Pardo Bazán, del colegio Froebel, un grupo numeroso de padres, acompañados de sus hijos, acudieron al registro del edificio administrativo con el objetivo de entregar en el registro un escrito en el que se le solicitaba al jefe territorial de la Consellería de Educación, César Pérez Ares, la conclusión de las obras prometidas en el centro escolar.
La "sorpresa" fue que al llegar la sede de la Xunta les estaban esperando un grupo de policías que les impidieron el libre acceso al edificio "indicándonos que deberíamos entrar en grupos de 3 personas como máximo".
"Ningún agente nos justificó esta medida, es más, cuando fuimos logrando acceder al interior del edificio, nuestra sorpresa fue que la actividad administrativa era más bien escasa con lo que la restricción adoptada, ya de por sí injustificable, se tornó en intolerable", dicen los afectados.
En un comunicado la ANPA desde centro educativo público de la ciudad de Pontevedra recuerda que acudieron la Delegación Territorial de la Xunta "con el único ánimo de hacernos ver y oír", por lo que ven como "una reacción desproporcionada", la actitud mostrada por los agentes de policía "máxime si tenemos en cuenta que estaban nuestros hijos e hijas presenciando todo lo que allí sucedió".
"Nos gustaría recibir algún tipo de disculpa por parte de la administración en vez de echarnos en cara las inversiones hechas en el centro", dicen los padres en su escrito.
Desde la ANPA aseguran que "siempre reconocimos lo realizado", en relación con la primera fase de las obras y parte de la segunda, "pero eso no exime a la administración de cumplir sus promesas y concluir unas obras que son más que necesarias".
SOLUCIÓN POLÍTICA
El primer grupo de padres que accedieron a la sede administrativa presentaron el escrito y "viendo que las cosas se estaban poniendo muy tensas en el acceso al edificio", decidieron subir a las oficinas del jefe territorial para saber si se encontraba allí y comentarle lo que estaba sucediendo. No acudieron en representación de todo el grupo, sino simplemente a intentar que alguien intercediera en la situación para evitar que se agravase.
Recuerdan que a causa de que no se finalicen las obras "es técnica, sino política"
El jefe territorial no se encontraba en el despacho y la secretaria les ofreció hablar con el arquitecto. Rechazaron el ofrecimiento "porque primero, no iban como representantes de la ANPA y segundo, en ese momento no necesitaban a un técnico que explicara la situación de las obras, de sobra conocida, sino un político que solucionara lo que estaba sucediendo".
Desde la ANPA recuerdan que a causa de que no se finalicen las obras "es técnica, sino política", ya que entienden que la Consellería de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria "no destina los recursos económicos para que se puedan ejecutar unas obras que estaba previsto que se concluyeran en 2015 y que a día de hoy ni siquiera están presupuestadas".