Denuncian que el "colapso" del 112 afectó a la gestión del naufragio del Nuevo Marcos
Por Redacción
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La "caótica" situación que se vivió hace un año en el incendio de la nave de Fandicosta (Moaña) no fue, según las asociaciones profesionales de las emergencias en Galicia, un hecho "aislado". El naufragio del barco Nuevo Marcos, la mayor tragedia de los últimos años en la costa gallega, tampoco fue atendida debidamente por el "colapso" que vive el 112.
Así lo denuncian en un comunicado la asamblea de trabajadores del 112 Galicia, junto a otros cuatro colectivos: la Asociación Galega de Técnicos en Emerxencias Sanitarias (ASGATE), la Asociación de Técnicos de Emerxencias Sanitarias e Xestores de Emergencias de Galicia (TIENES Galicia), la Mesa Intersindical de Bomberos y la Plataforma de Bomberos Públicos de Galicia.
Todos ellos denuncian que los medios de respuesta acuática más próximos, que podrían haber apoyado a Salvamento Marítimo, eran los de los bomberos de Pontevedra, "en ningún momento fueron movilizados", ya que el organismo que los debería haber alertado, el 112, "desconocía que este parque contara con este tipo de recursos".
Este hecho demuestra "de la manera más dolorosa", señalan en su comunicado, el significado práctico de carecer de un mapa de recursos, igual que sucedió en el incendio de Fandicosta, del que este 9 de mayo se cumple ya un año.
Además, la situación actual del 112 también se evidenció, añaden estos colectivos, en el hecho de que, a la hora de movilizar otro "recurso esencial" para aquellos marineros, el helicóptero de rescate Pesca II, la plataforma tecnológica "bloqueó la llamada de alerta", retrasando alrededor de diez minutos la salida de los medios aéreos.
"Es un retardo inasumible que tiene unos responsables directos bien identificables", aseguran.
Así, reiteran que el traslado del centro de atención de emergencias del 112 a A Estrada "está extendiendo el colapso a otros organismos", entre los que citan a las urgencias sanitarias, los parques de bomberos, los dispositivos de rescate y salvamento, las fuerzas de seguridad o las agrupaciones de protección civil.
Todo esto se produce, señalan los trabajadores y asociaciones profesionales, por las decisiones estratégicas que viene tomando la Xunta de Galicia en materia de emergencias desde hace años.
Aseguran que la ausencia de un mapa de equipos de intervención actualizado, la arbitrariedad en la cobertura geográfica de estos recursos, el "alarmante" desequilibrio territorial en la protección de la ciudadanía ante las emergencias y la falta de "verdaderos criterios técnicos" en la movilización de medios, configura un panorama "abonado para la tragedia", que funciona "a base de la improvisación constante y favorece que se cometan descuidos una y otra vez".
La "temeridad" de la Xunta en esta materia se refuerza, denuncian, ante la privatización "sistemática" de los medios públicos de emergencias y la "consecuente" precarización de las condiciones laborales de los trabajadores, "primando" los intereses económicos de "empresas amigas" sobre la "salvaguarda" de una población a la que "están poniendo en peligro".
Ante esta situación reclaman "rescatar" el carácter público de los medios de emergencias para que, a través de la gestión directa y de un mapa de recursos "racional y equilibrado" se puedan optimizar los tiempos de respuesta y conseguir la "necesaria" integración funcional que "va más allá de hacer un edificio y poner la placa de centro integrado".
"Mientras la Xunta continúe abandonando sus responsabilidades y se empeñe en colocar los intereses empresariales por encima de todo, la situación sólo puede ir a peor", recuerdan estos colectivos, ya que entienden que "hacer negocio con las emergencias implica poner en peligro la vida de las personas, y cada día que pasa la situación se vuelve más incontrolable".
LA XUNTA DEFIENDE LA GESTIÓN DEL SINIESTRO
Horas después de emitir este comunicado, la Xunta de Galicia defendió la gestión de los servicios de emergencia durante el naufragio del Nuevo Marcos.
El gobierno autonómico desmintió "categóricamente" las acusaciones de negligencia por parte del comité de huelga del 112 y señaló que los protocolos de actuación funcionaron de forma correcta.
La primera llamada de alerta en el 112 Galicia, según la Xunta, se recibió a las 5.32. Procedía de un particular que paseaba por la playa y que se había encontrado a uno de los marineros mojado y con síntomas de hipotermia. Esa primera conversación duró tres minutos y 36 segundos, ya que la persona que llamaba estaba confusa.
A las 5.35 horas, el 112 puso el alertante en comunicación con el 061. A las 5.36 informa a Salvamento Marítimo de lo sucedido y este señala que va movilizar el helicóptero de salvamento. A las 5.40 Salvamento Marítimo llama al 112 y solicita hablar con el alertante y a las 5.42, el propio Salvamento Marítimo pide al 112 que se movilice al helicóptero Pesca I de Guardacostas.
Sobre el aviso a los bomberos de Pontevedra, la Xunta señaló que en incidentes de estas características los medios que se movilizan son los de Salvamento Marítimo, que es a quien corresponde la resolución de este tipo de emergencias.
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