Salvados por una señal
Por Redacción
Suspendido únicamente por una señal de tráfico doblada. Así quedó un coche, tras un despiste de su conductora, en la calle Altamira de Pontevedra. La fortuna impidió que el suceso tuviese consecuencias mayores para los dos ocupantes del vehículo, que evitaron caer por un desnivel.
El suceso, según relató la propia conductora a PontevedraViva, ocurrió sobre las 13.00 horas.
"Me puse nerviosa a la hora de aparcar y pisé el embrague en lugar del freno", ha asegurado la mujer, que ha reconocido que "habitualmente no suelo conducir".
La mujer, acompañada de su padre, acababa de regresar a Pontevedra desde Boiro y trataba de estacionar su vehículo en la calle.
La señal, que indica que la zona tiene limitados sus aparcamientos en horario comercial, quedó doblada sobre el desnivel, de unos dos metros, soportando gran parte del peso del vehículo e impidiendo que se precipitase desde las alturas.
Al nerviosismo propio del momento, se sumó la indignación de la conductora ante el retraso de la llegada de la grúa, que tardó casi dos horas, al temer que la señal podría ceder ante el peso del coche.