Rechaza el acuerdo que le ofrece la Fiscalía para evitar la cárcel por romperle los dientes a otro en una pelea
Por Oskar Viéitez
"Antes de empezar el juicio se me ofreció un acuerdo por parte de la fiscal para no ingresar en prisión, pero yo no puedo soportar que se me culpe de algo que no hice", así de firme se mostró ante el tribunal Brais O.F. un vecino de Pontevedra para el que el Ministerio Público pide una pena de seis años de cárcel por una agresión a la salida de un pub de la zona monumental.
Según la versión de los hechos del acusado aquel día se encontraba en el pub "Fifty" sito en la calle Barón de Pontevedra cuando otro cliente Gonzalo Adolfo O.E. inició una discusión intentando agredirle con un vaso.
Para evitar ser golpeado con el vaso, Brais agarró por el brazo a Gonzalo. Durante ese forcejeo acudieron varias personas para separar a los contendientes, entre otros el dueño del local y un camarero, que a empujones lograron echar a Gonzalo del pub, quedando Brais en su interior. Según esta versión del acusado, en ningún momento le propinó puñetazo alguno como sí sostuvo el supuestamente agredido, quien reconoció además que aquella madrugada del día 3 de diciembre del año 2010, se encontraba muy bebido y que tras ser expulsado del pub se cayó en la calle.
El dueño del pub y el camarero testificaron que Gonzalo estaba aquella noche muy agresivo y que provocó la pelea intentando agredir con el vaso, asegurando que en ningún momento vieron el puñetazo que alega la acusación.
Durante el juicio celebrado este martes 17 en la sección cuarta de la Audiencia provincial de Pontevedra, la dentista que atendió al supuestamente agredido explicó que la reposición de las piezas dentarias supuso un total de 9.760 euros y que a su paciente ya le faltaban otros dos dientes antes de aquel suceso. Además señaló que la pérdida de los dientes era perfectamente compatible con el traumatismo producido por una caída.
Gonzalo presentó denuncia por aquellos hechos dos meses y medio después de la reyerta.
Para el fiscal estos hechos son constitutivos de un delito de lesiones por el que pide una pena de seis años de prisión. Y pide además que el acusado indemnice al agredido en la cantidad de 700 euros por las lesiones y 9.760 euros por la reparación de la dentadura.
Por el contrario el abogado de la defensa pide la libre absolución al entender que existe la eximente completa de legítima defensa, la falta de testimonios que acrediten que hubo agresión por parte de su defendido y que los peritos explican que el golpe pudo haberse producido por una caída lo que crea una duda razonable.
El abogado de la defensa apuntó que incluso existe base suficiente como para denunciar al supuestamente agredido por falso testimonio.