JM Arceu
La espina de España
Sin tiempo para rodeos, la grada en pie y el pie anclado en el terreno. Ondea el capote peinando el aliento del toro, y el pecho, sudoroso, teme la sangre ajena que derrama la inocencia. Un campo, una contienda, dos esclavos y un destino trágico entre murmullos y aplausos. Las miradas lo dicen absolutamente todo cuando te quedas sin habla, porque la imagen cruel vale más que los fonemas surcando el aire cuando el silencio desgarra. Y el cansancio de dos criaturas, milagros de la naturaleza, enfrentados por la incultura y la firmeza de la ignorancia egocéntrica; llora con lágrimas de sudor forzado.
Levanta la mano, el rojo clama la atención y se prepara para el asalto. El otro, engañado, golpea el suelo excitado entre confusión y vehemencia. Dos exhalaciones vigorosas y se dirige hacia el corredor lapidario. Es el discurso de la defensa del arte pintado en aquella pared por Charles Manson, o es la estúpida competencia para demostrar quién tiene el miembro más largo. Un minuto de silencio por el hombre, la vileza y el irónico estiércol que expulsamos y nutre los vegetales que nos alimentan.
Acertó por el túnel hasta el objetivo y sonó la onomatopeya que significa el adiós al dolor y la bienvenida a otro posible mundo. Ha ganado el rubor de una especie perdida, embutida en carencias de la virtud de una razón mal ejecutada. Y el aplauso de los expectantes, como un estruendo en mi cabeza sonando hasta límites insospechables; la sonrisa de la crueldad clavada en mi talante, silenciándome. Resignado, abandono el espectáculo.
Soy un cobarde.
Y cada noche me enfrento a la mirada cornúpeta de aquel bravo, sin poder razonar; sin poder, siquiera, brindarle una mísera disculpa.
La tierra a mis pies, ensangrentada de inocencia. El bramido de las palmas a la vista de unos ojos confundidos. Mis retinas apagadas. Mi mente, carburando recuerdos en contra de mi voluntad. El sueño dando vueltas como aquel toro mareado. Las risas apuñalándome la espalda.
Como la rosa que coges y no entiendes por qué con espinas se te clava.